LA DOBLE MORAL DE LA VIDA

No se trata de apabullar y se trata de comprender y bla, bla, blá... Hay que empatizar y te lo dice un trepa que ha ascendido a base de pisar a los demás y de traicionar hasta a sus propias castas. Pero claro, nosotros somos los imbéciles que tenemos que vivir con cara de buenos y además, nos pasamos la vida teniéndolo que demostrar y mientras los trepas se dedican a hacer su Agosto. Porque más o menos esto, es lo que deben pensar los políticos corruptos y vosotros plebe, dedicaros a seguir creyendo en la puta democracia o en el cuento de Caperucita Roja y el poder del voto, que nosotros mientras tanto nos ponemos las botas. Es increíble el poder que tiene la corrupción en España, pero ellos meten la mano en el saco y los demás, los siguen votando ( yo no y porque nunca los voté y por eso, digo y hablo de los demás).

De alguna manera se aprueba esa praxis, porque todo dios sabe de que pie cojea cada uno y la corruptela se nota en la distancia.
   - Se sabe por sus personajes: porque son altivos y chulos, porque son pijos y horteras, porque te miran con desprecio y se ríen delante de tu pura cara.
   - Se sabe por sus ostentaciones: por sus bugas de más de 40.000 euros, por sus yates de a todo lujo, por sus casas tipo mansiones.
   - Se sabe por sus costumbres: les gusta ir de caza mayor (algún fin de semana) y jugar al Golf los domingos y festivos, también les gusta ir a Misa y de paso lucir su nuevo look de nuevo rico.

Por eso yo insisto en éste tema y por eso mismo digo que todo y absolutamente todo tiene un doble sentido, que para unos es cojonudo y que para otros, es una mierda pinchada en un palo y a nosotros en éste caso, nos tocó ser la mierda pinchada en un palo. Todo tiene su doble moral o su doble ideología y por tanto, yo seré empático con quién me de la gana y no lo seré, con quién no me apetece, que suele coincidir (que no siempre) con quién me roba y además, me estafa.