Alguien me dijo un día
sal de tus localismos
que parecen ombligos mal criados,
siempre dándole las mismas vueltas al tema,
siempre hablando de sus cielos,
de sus nubes de tormenta,
de sus vientos,
de sus lluvias caudalosas,
de sus costumbres sanas e insanas,
de sus hechos contrahechos y mal paridos,
de sus pequeños entuertos del día a día,
de sus entrañables playas,
de sus montes y bosques mágicos,
de sus ríos sinuosos....
y por eso me voy a apoyar en una poetisa gallega
"Rosalía de Castro"
cuando en uno de sus poemas decía a modo de despedida de su tierra:
Miña terra, miña terra
Terra dónde me eu criei
Hortiña que quero tanto
Figueriñas que prantei
Terra dónde me eu criei
Hortiña que quero tanto
Figueriñas que prantei
Prados, ríos, arboredas
Pinares que move o vento
Paxariños piadores
Casiña do meu contento
Pinares que move o vento
Paxariños piadores
Casiña do meu contento
Campaniñas timbradoiras
Da igrexiña do lugar
Amoriñas das silveiras
Eu lle daba o meu amor…
Da igrexiña do lugar
Amoriñas das silveiras
Eu lle daba o meu amor…
Yo si tuviera un traductor simultáneo,
simplemente os lo traduciría,
pero creo que más o menos se entiende
y no me hagáis mucho caso,
ahora digo esto
y mañana, seguro que digo lo contrario
en fin, todo es relativo
y nada es absoluto.

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