YO PREFIERO LA VERDAD...

 Hoy es Jueves y día 19 de septiembre. Hoy cumple años mi hijo mediano y yo cumplo con él esa pequeña y mínima parte que me corresponde como padre. Yo descumplo años y vamos restando años que me quedan de vida y cada vez que cada uno de mis hijos (tengo 3) cumplen años a mi me restan uno. Descumplir es restar de una suma de años hipotética y como es hipotética no se puede concretar en números o mejor dicho, cada día o cada mes o cada año, se puede ir actualizando esa cifra. Yo que sé, si quieres ponerle 63 años (los que ahora tengo) pues pasa que la espicharé antes de fin de año y punto y pelota. Yo ahora prefiero hacer el cálculo por décadas, así todo es más abstracto y por tanto es más difícil el meter la pata. Que si te confundes tampoco pasa nada, nadie te va a reclamar cuando estés fiambre el que te habías equivocado y el porqué y el como. Yo por tanto ahora, miro a los 70 años y cuando llegue a los 70 miraré a los 80 años, pero a partir de estos ya no podré seguir contando por décadas y tendré que hacer como hacen con los carnet de conducir de los viejos muy pasados y muy caducos, tendré que ir de 3 en 3 años o de uno o en uno y dependiendo de como vayan los resultados médicos de la salud.

De todas formas y lo digo sin ánimo de dar pena, yo me siento bastante viejo caduco. He metido un bajón de cojones y eso suele pasar en la puta vejez. Vas un día y de buena mañana y apareces doblegado como un junco vencido y en un puto año de mierda. pierdes unos cuantos centímetros de estatura. Hay la decadencia física del poquito a poquito y esa la vas notando pero menos y hay la decadencia bruta del que ha dado un paso de gigante hacia el encogimiento y para caer en picado y esa no es que no la notes, es que una realidad que te muerde y que te come los huevos de la angustia que te da. Que sí, que debía ser más suave y esas cosas que siempre se le dicen a los viejos pellejos, ¡abuelo no seas tan negativo!...¡aún te queda vida para rato!...¡me oyes bien!...¡que aún te queda vida para rato!. 

Sordo, medio ciego, sino ciego del todo, incapacitado por tantas articulaciones en el taller mecánico, terco de cerebro y por el poco riego, piel encallecida y cuarteada por el uso del día a día, pellejos de gallo o de gallina vieja, esfínteres corrompidos y flojos (vamos, que te cagas o que te meas, fácilmente), obsesivo con las malas digestiones y las putas diarreas que más tarde se convertirán en dolorosos estreñimientos...Total que te sobreviene una gran disfunción orgánica casi total y absoluta y todo eso lo tienes que ir acoplando y ajustando en cada momento. Y todo eso lo puedes llevar de puta madre, si sabes la que te va a venir encima o no y depende de como te lo tomes. Pero desde luego sino lo sabes, no podrás enfrentarte de cara a ese problema o a esa realidad de que ya eres un viejo al que le pasarán muchas cosas de las anteriormente mencionadas. Si tú eres capaz de ver, sentir e intuir la decrepitud de la vejez, tendrás una gran parte del camino ganado. Yo prefiero la verdad, aunque a veces duela...y aunque esa verdad resulte a veces, ser tan dura.