Y es que el Monedero se ha ido de la dirección de Podemos. Cosa que ya tenía que haber hecho hace un tiempo y por dignidad, pues si había sisado un poco de la pasta pública y por purista tocapelotas que dice ser que es, en consecuencia ya tenía que haberse ido antes. Y ahora Podemos ya queda mal, ya es tarde y si el tío seguía aferrado a su sillón, Podemos debió abrirle la puerta, cosa que no hizo y que además se cerró en banda y en clave de cónclave.
Ahora va el tío y se tira el moco y ahora dice, que vuelve a ser el mismo de siempre y que se sentía acorralado. Pobrecito el tío que es amigo del Nicolás Maduro y de su pajarito, el Hugo Chavez y que sisó y que sisó sólo un poquito del heraldo público. Bueno, por mi perdonado, pero perdonado si primero lo reconoce, que yo ya no estoy para orgullitos de gallitos. Resulta que el tío problema es todo un ideólogo del tinglado Podemos y es el encargado de dar los barnices pertinentes, ahora un poco de radicalidad y ahora otro poco de mierda pastelera.
Total, que como ahora no son de izquierdas, ni de derechas y son sólo un asunto transversal, que ellos sabrán traducir algún día al idioma humano, pues que nada: ¡qué viva la política de dar bandazos!. Bien, estoy de acuerdo en luchar a muerte contra las corruptelas y yo de hecho ya dejé mi vicio de sisar un poquito y dejémonos de tantas Asambleas ciudadanas y vayamos al grano: ¿Queremos pagar la deuda exterior?, ¿queremos suprimir los desahucios?, ¿queremos erradicar la pobreza y el hambre?. Pues si estamos de acuerdo en esto, ya es un paso y quedan muchos más pasos. Pues nada, a la faena, que el tiempo es oro y yo quiero ver los hechos.
Ahora va el tío y se tira el moco y ahora dice, que vuelve a ser el mismo de siempre y que se sentía acorralado. Pobrecito el tío que es amigo del Nicolás Maduro y de su pajarito, el Hugo Chavez y que sisó y que sisó sólo un poquito del heraldo público. Bueno, por mi perdonado, pero perdonado si primero lo reconoce, que yo ya no estoy para orgullitos de gallitos. Resulta que el tío problema es todo un ideólogo del tinglado Podemos y es el encargado de dar los barnices pertinentes, ahora un poco de radicalidad y ahora otro poco de mierda pastelera.
Total, que como ahora no son de izquierdas, ni de derechas y son sólo un asunto transversal, que ellos sabrán traducir algún día al idioma humano, pues que nada: ¡qué viva la política de dar bandazos!. Bien, estoy de acuerdo en luchar a muerte contra las corruptelas y yo de hecho ya dejé mi vicio de sisar un poquito y dejémonos de tantas Asambleas ciudadanas y vayamos al grano: ¿Queremos pagar la deuda exterior?, ¿queremos suprimir los desahucios?, ¿queremos erradicar la pobreza y el hambre?. Pues si estamos de acuerdo en esto, ya es un paso y quedan muchos más pasos. Pues nada, a la faena, que el tiempo es oro y yo quiero ver los hechos.

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