Hay días, como el de hoy, en que no se puede estar para mucho, vamos, se está para ir tirando y gracias...pero tiene que ser así, no puedo dormirme por el día porque sino la noche venidera será de insomnios y yo odio los insomnios y ellos a mi. Nos odiamos por tantas noches que pasamos juntos y porque nos conocemos tanto que hasta creo que nos damos asco y es que si tengo nos puntos más flojos que otros (qué los tengo), son mis insomnios. Son esas horas muertas llenas de miedos y de temblorosos pensamientos y esa idea que te parecía tan clara de día, pues pasa que con el insomnio se cubre de dudas. Los miedos se multiplican, las decisiones se postergan, los malos rollos se reproducen y los pensamientos se retuercen sobre si mismos y cada campanada del reloj de la Iglesia te suena a advertencia o a condena.
Por lo tanto está muy clara mi decisión de hoy: es aguantar despierto y sea como sea. Como decía el otro: más jodidos están en África y sí que lo están, pero tengamos cuidado con esa clase de comparativas, porque al final lo que pretenden y consiguen es que no te quejes de nada y sin quejarnos ¿qué somos?,. No somos nadie. Sin quejas no hay revueltas, ni revoluciones, ni hay alborotos, ni terremotos...sin quejas el agua siempre está clara y cristalina y no se trata de eso, se trata de que esté clara pero que a veces esté revuelta, se trata que entre tanta claridad haya un poco de confusión, se trata de que somos humanos y que por tanto, tenemos un buen montón de fallos.
No se trata de conseguir ser unas putas máquinas perfectas y más bien se trata de mostrarnos tal y como somos y con nuestros defectos y con nuestras virtudes. No es la perfección lo que algunos queremos, yo prefiero las máquinas de pensar imperfectas, las que se calienten por exceso de uso, las que se desgastan de pensar siempre en lo mismo, las que de vez en cuando hay que engrasar y buscar los recambios de sus piezas...y es que prefiero la imperfección de la mente que a las ideas protocolizadas y porque así, están escritas.
Por lo tanto está muy clara mi decisión de hoy: es aguantar despierto y sea como sea. Como decía el otro: más jodidos están en África y sí que lo están, pero tengamos cuidado con esa clase de comparativas, porque al final lo que pretenden y consiguen es que no te quejes de nada y sin quejarnos ¿qué somos?,. No somos nadie. Sin quejas no hay revueltas, ni revoluciones, ni hay alborotos, ni terremotos...sin quejas el agua siempre está clara y cristalina y no se trata de eso, se trata de que esté clara pero que a veces esté revuelta, se trata que entre tanta claridad haya un poco de confusión, se trata de que somos humanos y que por tanto, tenemos un buen montón de fallos.
No se trata de conseguir ser unas putas máquinas perfectas y más bien se trata de mostrarnos tal y como somos y con nuestros defectos y con nuestras virtudes. No es la perfección lo que algunos queremos, yo prefiero las máquinas de pensar imperfectas, las que se calienten por exceso de uso, las que se desgastan de pensar siempre en lo mismo, las que de vez en cuando hay que engrasar y buscar los recambios de sus piezas...y es que prefiero la imperfección de la mente que a las ideas protocolizadas y porque así, están escritas.
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