De entrada NO. Y bueno, es una forma más de decir que todo es negociable y de entrada No, pero si por el medio negociamos, pues puede ser que sí o que sí pero no o no pero sí. Es que me estaba acordando de aquello que decía el PSOE de éste paupérrimo país: "Otan de entrada NO" y así fue la cosa y acabamos dentro de la Otan y hasta en sus agallas. Yo desde esas desconfío de cuando alguien me dice que NO, pero como todo se puede negociar, pues negociemos. Y claro, ¡que todo se puede negociar!, pero a mi me enseñaron que si uno tiene sus principios y las ideas claras, sabrá que hay cosas que NO, que no se pueden negociar e independientemente de las condiciones.
Yo no voy a negociar si apoyo las guerras y tampoco voy a negociar en las rendiciones, pues en las rendiciones no hay nada que negociar y si tú has perdido tendrás que rendirte y ponerte a llorar por las esquinas de la vida (digo yo) o debajo de un puente. Hay cosas que son innegociables y sólo requieren que tomes una postura previa: o es SI o es NO. Es como negociar con la Muerte y cuando tu fecha de caducidad ya está marcada, ¿qué vas a negociar?. Morirte de mañana o a última hora y a cambio ¿qué tendrás que hacer?...quizá no protestar cuando sientas como ter abrasan las llamas (porque yo cuento y sé, que acabaré en el puto y ardiente Infierno).
Y sabiendo eso ¿qué voy a negociar?, ¿a qué temperatura prefiero que me tuesten?...¡¡coño!!, ¡que más me da!...si ya estoy muerto y en tal caso, serán mis gusanos los que mandan. De negociar y si hablamos de negociar de verdad, que sea de negociar entre la vida y la muerte, no sé el tema demás días, demás meses, demás años...pero sabéis una cosa, pasa que ese tema no se negocia y porque no se puede negociar y porque al nacer ya tienes puesta la fecha de caducidad.
Yo no voy a negociar si apoyo las guerras y tampoco voy a negociar en las rendiciones, pues en las rendiciones no hay nada que negociar y si tú has perdido tendrás que rendirte y ponerte a llorar por las esquinas de la vida (digo yo) o debajo de un puente. Hay cosas que son innegociables y sólo requieren que tomes una postura previa: o es SI o es NO. Es como negociar con la Muerte y cuando tu fecha de caducidad ya está marcada, ¿qué vas a negociar?. Morirte de mañana o a última hora y a cambio ¿qué tendrás que hacer?...quizá no protestar cuando sientas como ter abrasan las llamas (porque yo cuento y sé, que acabaré en el puto y ardiente Infierno).
Y sabiendo eso ¿qué voy a negociar?, ¿a qué temperatura prefiero que me tuesten?...¡¡coño!!, ¡que más me da!...si ya estoy muerto y en tal caso, serán mis gusanos los que mandan. De negociar y si hablamos de negociar de verdad, que sea de negociar entre la vida y la muerte, no sé el tema demás días, demás meses, demás años...pero sabéis una cosa, pasa que ese tema no se negocia y porque no se puede negociar y porque al nacer ya tienes puesta la fecha de caducidad.
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