¡HA QUEDADO CLARO!

Y ahora son las 5 de la tarde y bueno....... y ¿qué deciros?...no sé, titubeo, dudo y sueño y tengo esa modorra que entra después de comer y que los españoles conocemos muy bien, pues para eso practicamos la Siesta, bueno yo no, salvo cuando trabajo y entonces y si me dejan los pacientes impacientes, entonces la duermo, porque en el curre hay que dormir lo máximo que se pueda, pues pasa mejor el tiempo y cuando tengas que actuar lo harás mejor y más despierto. Pero al tema que yo voy, es que uno no nace médico y si que en tal caso, uno se va haciendo médico, bueno hay algunos que antes de nacer ya sabían que iban para Médicos y por eso salieron con un cartel en la frente que ponía: "soy Médico". Ya sabéis que estos son los de la corriente que dice que lo de ser Médico se lleva en la sangre y yo añadiría algo más: y en los calzoncillos...¡No te jode!.

Pero estos señores aún tienen otra carta bajo la mesa o sea, primero insisten y con inusitada insistencia que ya nacemos Médicos y que éramos Médicos antes de nacer y segundo y por si le falla lo primero, se inventan que somos Médicos por vocación, que no sé, el tema de la vocación debe ir dentro del grupo sanguíneo y está en el gen más escondido que podamos tener. Mirar, la vocación es para los curas, que además de pederastas (la mayoría de ellos) creen ser la voz del Señor, del Señor Jesucristo o sea, la voz de Dios. Y yo no voy tan lejos, pues mi voz es la mía y además, me niego a representar a nadie y menos a Dios (aunque yo no crea en él).

Yo soy todo un tío tranquilo que vive en su preciosa Isla de Menorca y que no ha matado a nadie hasta hoy, lo cual no quiere decir que hoy aún no esté a tiempo de matar a alguien, por lo menos metafóricamente hablando...porque ganas tengo. Además, soy Médico y no soy Médico de vocación, ni lo soy porque estaba escrito antes de nacer y simplemente lo soy por mis circunstancias y que al echar la moneda al aire entre Biología y Medicina, salió cara, lo cual equivalía a hacer Medicina y por eso soy Médico y bueno y porque después me gustó y me encantó. O sea, soy Médico por evolución y no por vocación. ¡Ha quedado claro!.

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JULIO CORTÁZAR