Para contestartetendría que oír tu silencio
y no la vaciedad de tus palabras.
Para contestarte
tendría que anularme
y escribir por decreto ley.
Para contestarte
mejor sería no hacerlo,
y por el respecto que te tengo
y por no perder el saber estar.
Para contestarte
...no soy, no funciono...
prefiero que busques en el pozo de mis argumentos,
que los arañes,
que los veas y los destroces,
y tal y como tú me has destrozado
y entonces
¿qué te voy a contestar?.
Que estoy dolido, que estoy jodido,
que me atraganto con las letras,
que respiro ira y destilo veneno,
que no puedo más...
que cuando empiezo a pensar,
que esto ya está superado,
apareces tú como un espíritu que flota
y que dice:
aquí no ha pasado nada y vamos a reírnos de todo
y va a ser verdad,
aquí no ha pasado nada más que lo que tenía que pasar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario