Debemos crearnos nuevos espacios...no sé como, ni sé donde, pero bueno, ya se sabe y nosotros sabemos que buscando y buscando quizá llegues a encontrar algo y porque lo que está más claro que el agua es que si no buscas, nunca encontrarás nada. Total que nos hemos pasado nuestra vida buscando y sin ningún descanso, porque los lapsus que hemos tenido en modo "en blanco" no son propiamente, descansos y son lapsus por diversos motivos: por estar empanado, por estar enamorado, por estar colgado de alguien o de algo o por pensar que en la vida todo iba a ser risas y abrazos que no requerían más esfuerzo que el propio abrazo o beso, en si mismo y sin más...Y hablando de lapsus, mis lapsus fueron bastante abundantes en número y en profundidad (como cargas de profundidad, que se les mandaba a los Submarinos) y llegaron a alterar mi línea de flotación, esa línea que separa (a veces demasiado finamente y demasiado sutilmente) la locura de la cordura y que me hacía estar en la parte más cuerda estando más loco y no al revés, nunca es al revés, porque no hay loco cuerdo, pero no hay porque yo no quiera, sino porque así definen ellos (los cuerdos) la distinción entre lo loco y lo cuerdo y además eso, es mano de santo, es intocable, es una principio de los más principios sociales y no toques, ni pongas en duda el campo o el límite que separa la cordura de la locura y porque sino ¿qué harían los cuerdos?.
Los Cuerdos mandan y ¡como mandan! y mandan y ordenan y dictan leyes y ponen sentencias y emiten condenas, fuertes condenas y condenas con o sin cadenas. Los Cuerdos saben tenernos engañados o eso piensan ellos, que nos engañan y por eso hacen que vivimos en democracia y que nuestro voto es el poder del pueblo, pero a éstas alturas ya no nos engañan y su circo huele demasiado a Payaso...y pobres Payasos, pero no puedo con ellos...y no lo recuerdo, pero me supongo y estoy casi seguro de ello, que cuando era pequeñito alguno de ésta especie y que por cierto, ahora en vías de extinción, me hizo una putada que me quedó grabada para mis restos y creo que lo dejaré como herencia para mis descendientes y porque otra herencia no van a tener y porque otra no les puedo dejar y no por nada, sino porque no tengo nada que dar o que dejar.
Pero volvamos al tema problema de los CUERDOS. Los Cuerdos dominan el mundo y lo hacen desde la ONU a la OTAN y pasando por el Pacto de Varsovia. Los Cuerdos dominan los Parlamentos y por eso se pasan el día dictaminando leyes cuerdas. Y para qué hablar de la cordura de la Justicia y de sus putos Jueces y más leyes...y más leyes y todas cuerdas y sensatas y al cuerdo siempre lo salvan porque tiene condicionantes que lo llevaron a asesinar o a matar y por tanto son eximentes y en cambio los Locos estamos condenados a seguir viviendo entre los Cuerdos. Y eso...y eso...y eso ¡no tiene perdón de Dios!.
Los Cuerdos mandan y ¡como mandan! y mandan y ordenan y dictan leyes y ponen sentencias y emiten condenas, fuertes condenas y condenas con o sin cadenas. Los Cuerdos saben tenernos engañados o eso piensan ellos, que nos engañan y por eso hacen que vivimos en democracia y que nuestro voto es el poder del pueblo, pero a éstas alturas ya no nos engañan y su circo huele demasiado a Payaso...y pobres Payasos, pero no puedo con ellos...y no lo recuerdo, pero me supongo y estoy casi seguro de ello, que cuando era pequeñito alguno de ésta especie y que por cierto, ahora en vías de extinción, me hizo una putada que me quedó grabada para mis restos y creo que lo dejaré como herencia para mis descendientes y porque otra herencia no van a tener y porque otra no les puedo dejar y no por nada, sino porque no tengo nada que dar o que dejar.
Pero volvamos al tema problema de los CUERDOS. Los Cuerdos dominan el mundo y lo hacen desde la ONU a la OTAN y pasando por el Pacto de Varsovia. Los Cuerdos dominan los Parlamentos y por eso se pasan el día dictaminando leyes cuerdas. Y para qué hablar de la cordura de la Justicia y de sus putos Jueces y más leyes...y más leyes y todas cuerdas y sensatas y al cuerdo siempre lo salvan porque tiene condicionantes que lo llevaron a asesinar o a matar y por tanto son eximentes y en cambio los Locos estamos condenados a seguir viviendo entre los Cuerdos. Y eso...y eso...y eso ¡no tiene perdón de Dios!.

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