YO ERA Y SOY MENTIRA

Dicen que la música amansa a la fieras,

por eso, me pongo música a todas horas,

como sedante, como tranquilizante de mis alterados nervios,

bueno, eso dicen algunos que estoy y soy nervioso,

si me conocieran en otros tiempos, pensarían otra cosa,

pero yo no he venido aquí a convencer a nadie,

ni soy un apocado siempre tranquilizado

ni me como a niños por la calle,

digamos que juego con los dos extremos

y me gusta ese tipo de juego,

ser y no ser,

estar y no estar,

querer y no querer,

amar y odiar

y después de odiar volver amar,

pero esto último son excepciones a la regla,

después de odiar es casi imposible volver a amar,

hay casos en la historia de mi vida,

pero han sido como enfermedades raras que he padecido

y además, había que hacerse la pregunta del millón:

¿realmente llegué a odiar a esa persona que después volví a querer?,

porque igual que el amor el odio también se disfraza de falsa apariencia,

y ese odio a lo mejor y digo a lo mejor, era un odio descafeinado

y simplemente era un cabreo hacia esa persona

¿quién sabe?

pero como dije antes, yo no vine aquí a demostrar mis teorías,

yo simplemente las digo y las escribo

y quién no me crea, tendrá dos trabajos

no creerme y descreerme

y quién me crea que no se quede todo convencido,

pues miento más que pienso,

es más antes de ponerme a pensar en la evolución de la vida humana

yo era un ser embrión mentiroso nadando en medio del líquido Amniótico,

hacía mis largos y en todos los estilos habidos y por haber.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

JULIO CORTÁZAR