He llegado a comprender
y después de mucho sudor y esfuerzo,
que estoy dividido en dos partes,
un tercio de mi,
es bueno y es sano
y los dos tercios restantes,
es maldad infinita y elevada al cubo.
A veces parece que estoy masticando clavos afilados
y a cada mordisco me descompongo un poco más por dentro,
rezumo maldad por todos mis poros,
y a mis entrañas las araña un gato que tengo encerrado en mi colon irritable...
No sé... hay días como el de hoy,
que sino lloro
es porqué después me tengo que pedir perdón
y yo no estoy para pedir perdón a nadie,
ni para auto consolarme
yo estoy para mantenerme en el aire
y colgado del delicado hilo que me une a la madre tierra.
Yo no estoy para recitar poemas con la luna llena,
lo estaba
pero ahora, ya no,
ahora os puedo contar un cuento que puede hablar de amor,
pero esa fuente de amor inagotable
poco a poco se va agotando
y prefiero hablar del amor de otros tiempos
y del cubo de odio que fue in crescendo dentro de mi,
y de la rabia que sube y baja
y de mi infancia y de primer gran amor.
En fin, prefiero contar mis sueños más locos
pero las pesadillas poco a poco
van ganando terreno dentro de mis entrañas.

No hay comentarios:
Publicar un comentario