Tan fácil es suponer...
que hasta a veces resulta ser algo hiriente,
normalmente, supones lo peor
y en lo peor entra el daño que producirás.
Desde la lejanía puedo percibir
su olor a carne envenenada y putrefacta,
su estructura de odio y mala baba,
su espuma ácida
su textura de vómito regurgitado,
su traición de puñalada trapera
y la triste certeza
de que casi todo lo que puedes suponer
es para hacer más daño.
Por tanto,
yo no supongo nada.
Pero tampoco mi mundo se mueve
a base de certezas
a veces, sí
y otras veces, no
y en esa mezcla se basa mi fórmula
que como podéis comprobar
no tiene nada de fórmula mágica.
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