Sigo escribiendo
y lo hago subido a la telaraña de mi imaginación.
Me encanta las caídas al vacío de mi ego
sin flotador y sin red de seguridad
hiendo de cara hacia un agujero negro
que me lleve hasta tu ventana.
No pido nada a cambio,
llegar hasta tí,
se llama viaje
y sentir el frío cristal de tu ventana
se llama, sentimiento.
No hace falta viajar en lo físico
ni en lo químico,
llega con viajar ligero de ropa,
suavemente dotado de amor y cariño
y con muchas dosis de imaginación desbordante.
Sigo escribiendo
y lo hago subido a la telaraña de mi imaginación.
Me encanta las caídas al vacío de mi ego
sin flotador y sin red de seguridad
hiendo de cara hacia un agujero negro
que me lleve hasta tu ventana.
No pido nada a cambio,
llegar hasta tí,
se llama viaje
y sentir el frío cristal de tu ventana
se llama, sentimiento.
No hace falta viajar en lo físico
ni en lo químico,
llega con viajar ligero de ropa,
suavemente dotado de amor y cariño
y con muchas dosis de imaginación desbordante.

No hay comentarios:
Publicar un comentario