Uno aprende pero no tanto


 Yo podría deciros

que lo sé todo

pero claro, 

en esta historia no hay nada de verdad.

Sé algunas cosas

otras las sé, pero no las digo

y por el motivo que sea,

y otras muchas

no las sé

y porque en esta vida no me ha dado tiempo a todo

o porque durante un largo tiempo anduve despistado

o porque me perdí varias veces por el camino

o porque me anduve por las ramas y no fui al grano.

En realidad 

casi nunca se sabe la causa del porqué pasan esas cosas

y puede ser que sea por una conjunción de hechos

y contrahechos que fueron ocurriendo en mi vida,

y entonces, 

el día en que decidí marcharme de casa a los 15 años

fue un hachazo que di en mi historial vital

y desde aquellas, 

aprendí a pensarme dos o tres veces las cosas

o mismo cuando me detuvieron años después

y por ser un clandestino y subversivo

que solo tenía la revolución en mente

y cuando me detuvieron y me torturaron...

aprendí otra lección en mi vida

hay que andarse con cuidado

hay que saber ser cauto y precavido

y  esperar cuando era el momento adecuado

para salir a la calle

y para reivindicar todo lo inimaginable.

Pero no todo se basa en aprender de tus propios errores

y te dices, voy a ser cauto y precavido

y el resumen del resultado final

es que te han detenido 12 veces más.

Y entonces...

uno aprende pero no tanto.












 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

JULIO CORTÁZAR