Algunos piensan que ellos tienen el poder sobre todo lo que existe en el mundo. Y esos algunos se sienten de cada vez más poderosos y no se cortan en la demostración de que son los putos amos del mundo y se compran los mejores barcos valorados en billones de euros o de dólares y viajan ee los mejores aviones privados y porque a ellos, que les va a importar la contaminación que produce un avión y un día están en Hong Kong y otro día, están en Chicago y para echarse un partido golf o para que simplemente que alguien le rasque la espalda. Estamos llegando a semejante nivel, que el multimillonario no se corta ni un pelo y cambia leyes y pone otras y compra políticos y a otros los vende y sus lacallos políticos de cada vez se esconden menos y bueno y que vamos a saber los mortales de a pie, de que uno de ellos (uno cualquiera de ellos) puede tener más pasta que todo el continente africano o que toda sudamérica (por poner dos ejemplos). Y los de clase media y los pobres ¿qué hacemos?, pues les hacemos la ola y de paso les limpiamos sus zapatos de mil dólares. Y esto último es lo más jodido y es que la clase media y la más pobre, se pelean por sacarle brillo a sus zapatos de piel de cocodrilo y se doblegan y hasta los votan sin complejo ninguno. En mis tiempos ya lejanos, por lo menos los de clase media y baja, tratábamos de enfrentarnos a ese capitalismo feroz y que existía y que ahora nos invade y eso lo hacíamos para así defender nuestros derechos tanto laborales como sociales y ahora en cambio, los más ricos de cada vez tienen más apoyos y más votos de las llamadas clases populares y eso ¿hacia donde nos lleva?.
Y no hace falta ser demasiado listo para saber que esto nos lleva a que el rico y poderoso se haga más rico y nosotros (los demás) pasaremos a engrosar la larga fila de los pobres. A ellos y a sus políticos que tienen a sueldo, que les importa que cada vez haya más pobres y menos viviendas y menos ayudas sociales. El mundo de los ricos se desarrolla tras una valla imaginaria y de cada vez será más alta y no pararán hasta convertirla en una muralla de inmensas dimensiones y estará perfectamente vigilada por personas que cobrarán una mierda y que nunca dejarán de ser pobres. Ya no hay aquél rollo de que muchos ricos empezaron siendo pobres y que empezaron trabajando en el escalafón más bajo. Ahora el niño rico, ya ha nacido rico y dentro de su chavola de oro y plata y en su puta vida de rico, nunca ha cogido un servicio público de transporte y porque desde que nacieron siempre se les trasladó en limusina. Ni conocen hospitales públicos, ni universidades financiadas por el estado.
Todo su mundo y todo lo que poseen y tienen a su alerededor es privado y es de lujo. Y entonces una pregunta ¿ellos que poder van a defender?... pues el suyo (cual va a ser, si no). Y claro que hay mundos paralelos, pero estos no son estados o mundos paralelos y en cambio son una clara evidencia de que hay un mundo que vive del otro. Lo evidente no solo se dice y porque también se demuestra.
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