Señores vamos progresando. Ha llegado la Navidad, bueno no ha llegado pero sus anuncios pastosillos y casposos sí y éste año el premio lo ha llevado, el anuncio de la Lotería Nacional. Bueno y ya sé que se ha hablado tanto de él que casi no merece la pena comentar nada y además porque es un anuncio fácil o sea de malo, está puesto en bandeja su cabeza y hasta con la manzana, pero las ganas me pueden y por lo menos tengo que decir algo.Joder que país de pandereta, tal como estamos y la señora ministro contestando a preguntas sobre el anuncio, que por cierto, no sé quién será más descerebrado, el periodista que fórmula la pregunta o la señora ministra o tal vez sean los dos.Y va la tía y en base a las críticas que hay en las redes sociales sobre el mencionado anuncio y dice que el anuncio es bueno y que los españoles somos así, que hacemos coñas o chanzas de todo. Hale el mundo por montera señora y usted no se pregunta porque castigo divino o pepero tenemos que sufrir anuncios como éste. Porque el sabor del anuncio es rancio y a mi me hace retrotraerme al franquismo o lo que es lo mismo, cuando se hacían los primeros anuncios.
Bueno anuncio rancio, como rancios son ellos, tanto monta monta tanto.Para ello buscaron el decorado adecuado, pueblo castellano típico y de arquitectura sobria y seria y acorde con los tiempos. Vamos que yo no critico al pueblo, sólo faltaba, lo que critico es que el decorado es propio a sus fines, sobriedad rancia y castellana, austeridad y a apretarse el cinturón. Y para que hablar de los cadáveres protagonistas, pero no puedo aguantarme y voy a darles un repaso muy somero.
Primero que parecen que a los protagonistas los sacaron de los sarcófagos egipicios o fueron encontrados en Atapuerca, por lo menos a parte de ellos. Segundo que ya tienen pinta de fiambres de por sí y van y le exageran los rasgos más oscuros, sus ojos profundos y su cara acartonada. Tercero, que nadie del elenco escogido es sospechoso de ser rojo o rojillo, no señor, todos tienen su expediente inmaculado y bastante fachosillo.
Bueno y ahora vamos por partes. La Martita Sánchez, pija y requetepija y creo que Coruñesa, que aún la hace más pija y por tanto pija hasta la médula y como dije paisana mía y para mi desgracia. No si yo tengo unos paisanos que pa qué, verdad Mariano. La niña Pastori, que de niña un huevo y hortera hasta decir basta, también me tocó de paisana en Chiclana de la Frontera y donde la tipa vivía o tenía un chalet que servía de referencia a las naves espaciales cuando hacían viajes interestelares, dado el bonito color que siempre le daba a sus fachadas.Y aquí hago una pequeña reflexión, ¿puede una hortera cantar bien?, una pija sí puede, pero una hortera que no se respeta ni ella y se agrede a base de su mal gusto, no creo. La Monserrat Caballé, esta es fácil y está chupado, pues parece una foca polar a la luz de la aurora Boreal, incólume y gorda y con esa puta voz de grillo histérico, pero ahí está, al pie del cañón y jodiendo los tímpanos de sus conciudadanos.
Y el Raphael, hostia éste da mucho más que mucho, menuda pasa desfasada, menudo capullo reseco. Lo que no entiendo es como el Hígado que lleva transplantado, no huyó por patas de su cuerpo reseco y más cuando le oye cantar. Y esos piños grandes como palas y relucientes como plástico chino y esa exageración de los gestos y el na, na ,ná, engolando su boca y abriendo la mandíbula hasta verle el agujero del culo y por fin, esa manita que acompaña al na, na, ná, que parece que enrosca una bombilla y creo que el tío lo que intenta es imitar como esa manita de cerdo reviejo, es a unas campanitas y campanitas tiene éste crápula muchas, campanitas, cencerros y mucha mierda en su cerebro.
No hay comentarios:
Publicar un comentario