BESTIAS INTELIGENTES

Y yo digo, y digo que mucho presumir de inteligencia y de que somos seres superiores a los demás animales y a cada día que pasa, se demuestra más lo contrario. En general y digo en general, somos unos descerebrados y somos más animales que los propios animales, somos en definitiva, bestias inteligentes. Y como todas las bestias necesitamos tener un líder y una cabeza visible, una cabeza del rebaño y que dé órdenes y dicte las leyes y nosotros sólo juramos obediencia, obediencia ciega, diría yo.

Y todo esto que digo no es gratuito, es porque necesito un pequeño desahogo y por tanto estropicio que causamos, no sólo arrasamos con la naturaleza y en nombre de la ciencia y del progreso, sino que liquidamos animales y es más los extinguimos. Y para rizar el rizo, los dirigentes de los países más poderosos del mundo, no les llega con joder a sus paisanos, sino que su avaricia desmedida, les lleva a liquidar pueblos humanos y para ello se valen de todo, se valen de invasiones, se valen de montar guerras internas, se valen de poner gobiernos títeres y también se valen de enfrentar pueblos.

Todo vale para sus intereses y si por conseguir diamantes hay que liquidar varias tribus, se hace y sin remordimientos, después se habla de daños colaterales y punto y pelota. Ahora todo a nuestro alrededor es producto de importaciones, bonito nombre el de importaciones, pues en realidad son saqueos a otros pueblos más débiles que nosotros, en realidad son robos descarados.

 Pero como se dice, "ojos que no ven corazón que no siente". Y en realidad ni ésta frase cubre semejante desaguisado inhumano, pues nosotros vemos y sabemos, sólo que nuestros corazones no son corazones de carne y músculo, pues ya hace mucho tiempo que perdieron su sensibilidad, son corazones de piedra que no sienten ni padecen.

Hombre de vez en cuando nos limpiamos las conciencias apuntándonos a una causa por África y damos una limosna y que además resulta barata, pues para limpiar las conciencias llenas de sangre y hasta la bandera, es tarea infinita y nunca, nunca estará pagada. Pero bueno ya está, abrimos una pequeña ventana a África y después la cerramos, no vaya a ser que por esa ventana se cuele el virus del Sida, que por cierto en África, sí en África, repito, siguen muriendo por ésta causa cientos de miles de personas o ¿eran animales africanos?. Da igual, ¡a que sí!, pues son muchas cifras y sin ningún significado.

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JULIO CORTÁZAR