No encuentro la solución a mi vida y eso que ahora más o menos atino, pero me falta esa puntería que sólo tienen los craks. Los que dicen que son la hostia en verso y como suelen guapos de película, les caen encima los tíos o las tías como mosquitos y ellos, como son unos craks, se dedican a espantarlas. Es como los tíos o tías que son unos bollos de caramelo, que se pueden permitir ser raros, deprimidos, infelices, maniáticos, solitarios, megalomaníacos, chorizos, cabrones, estúpidos y todo, pero todo, se les permite. Bueno se lo permite su piara de fans.
Y en cambio tú, que eres bajito y medio gordito y la calva es una autopista hacia el cielo, tienes que hacer piruetas para que una tía se fije en ti. Tienes que hablar siempre y hacerte el interesante, tienes que estar atento a todo, ser simpático, complaciente, amoroso, cariñoso, leal, sincero, buen amigo y mejor persona, en fin, tienes que ser un puto bendito y aún así, la tía de turno, que al parecer ha caído en tus redes, te bombardea a dudas existenciales. Quiero estar contigo, te dice, pero no sé si como amante o como amigo y porque tengo muchos problemas. No te jode ¿y yo no?...
Y tu pensando por dentro, si yo lo que quiero es sólo echar un polvete. Vamos que tú tienes que currarte el tema como un cabrón, en cambio al guapete de turno, le hacen cola y hasta le hacen la ola. ¿Y esto es democracia?, ¿y esto demuestra que todos somos iguales?, pues o mucho me equivoco, pero creo que más bien es que no. Y es que como estén 100 tíos o tías en un fiesta y llegue un bollo despampanante, ya se jodió la fiesta para los 100 tíos o tías, pues pasamos de ser humanos a convertirnos en buitres. ¡Así es la vida!
Y en cambio tú, que eres bajito y medio gordito y la calva es una autopista hacia el cielo, tienes que hacer piruetas para que una tía se fije en ti. Tienes que hablar siempre y hacerte el interesante, tienes que estar atento a todo, ser simpático, complaciente, amoroso, cariñoso, leal, sincero, buen amigo y mejor persona, en fin, tienes que ser un puto bendito y aún así, la tía de turno, que al parecer ha caído en tus redes, te bombardea a dudas existenciales. Quiero estar contigo, te dice, pero no sé si como amante o como amigo y porque tengo muchos problemas. No te jode ¿y yo no?...Y tu pensando por dentro, si yo lo que quiero es sólo echar un polvete. Vamos que tú tienes que currarte el tema como un cabrón, en cambio al guapete de turno, le hacen cola y hasta le hacen la ola. ¿Y esto es democracia?, ¿y esto demuestra que todos somos iguales?, pues o mucho me equivoco, pero creo que más bien es que no. Y es que como estén 100 tíos o tías en un fiesta y llegue un bollo despampanante, ya se jodió la fiesta para los 100 tíos o tías, pues pasamos de ser humanos a convertirnos en buitres. ¡Así es la vida!
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