DOMINGO DÍA 30 DE NOVIEMBRE

Pues de nuevo aquí, al pie del cañón y dirigiendo mi pequeño cotarro o mi hacienda, como diría la Duquesa de Alba. La duquesa de Alba, esa ilustre señora que acaba de morir y que aún debe estar medio calentita, y que es una presa demasiado fácil para el escarnio. Por lo tanto, murió y yo ya he pasado página y por tanto seguiré escribiendo sobre mis verdaderas preocupaciones. Tanto como preocupaciones, me parece que es una cierta pasada, y estaría mejor decir, escribir sobre mis pensamientos.

No sé porqué tengo la obligación de buscar la palabra justa para decir, que yo escribo lo que me sale de los cojones. Bueno hoy es Domingo y por tanto es un día de alabanzas a nuestro señor y en definitiva para nosotros, es un día de puta sumisión. Hoy hay que rendir cuentas al gran jefe y mostrarle pleitesía. Yo de momento ya hice la misa desde la mismísima cama y mientras sobaba por la mañana, ya he comulgado como una buena docena de hostias. O sea que hoy  estoy limpio de pecado y ya puedo empezar de nuevo a pecar.

Hoy, por estos lares en los que vivo y a veces vegeto, está un día entre lluvioso y nublado y mejor que no llueva, porque lo llovido hasta ahora, era mierda en forma de tierra. Seguimos con ese Otoño que no es Otoño, que es una prolongación de lo que fue el final de Verano y por tanto, no sale el sol, pero tampoco hace frío. Estamos viviendo en un continuo limbo entre el Verano y el Otoño y yo ya estoy harto, pues¡no puedo encender mi estufa de leña!.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

JULIO CORTÁZAR