MINIMALISTA

Estoy pensando que lo mejor sería ir alternando, ir alternando un escrito y un poema y otro escrito y otro poema. Pero una cosa es el pensamiento y otra cosa son los hechos y algún día quizá alcance ese grado de perfección, pero de momento yo me hago cargo de mis propias limitaciones, porque para eso tengo un seguro a todo riesgo. O sea que me responsabilizo de mi mismo y por lo tanto, yo soy el que pone las condiciones. Y como de momento soy imperfecto y un ser limitado, me quedo más que contento con lo que hasta ahora estoy haciendo.

En menudo lío me he metido, porque me doy cuenta que me enrosco y me enroco yo solito. Porque a veces pasa eso, lo más sencillo de explicar se complica y vas de matización en matización y al final, te haces de la picha un lío. De todas formas no está mal el tema de ir fijándose en las carencias, pero con una condición previa y es que siempre hay que reforzar los puntos positivos. Vamos, para no ir cojo por la vida. Es importante la cuestión de no olvidarse de lo positivo, lo positivo es lo que te refuerza para ir mejorando las carencias.

Hay que ser autocrítico y hay que serlo mucho, porque sino te niegas a ti mismo a tener margen de mejora. Y también hay que ser crítico, crítico con todo lo que se menea, pues a veces dios puso mal el decorado y se excedió en hacer las cosas y paisajes demasiados barrocos y ya sabéis que lo barroco, cansa y satura. Hay que ser un poco minimalista con los pensamientos, pocas ideas y muy bien escogidas y por supuesto, puestas y colocadas en el sitio idóneo. ¡Joder!, como todo en la vida, ni más ni menos.