No sé...hay un pintor local que ahora se hizo famoso y todo porque le dio por pintar una tía gorda de color azul...y bueno, me alegro por él, porque se hizo famoso y creo que vende y de algo tiene que vivir...pero al mismo tiempo me da pena...no sé, me parece que está esclavizado a pintar a esa tía gorda y de color azul. Él no dirá lo mismo y porque eso nunca se puede decir, como va a decir el tío que está harto de pintar a esa mujer de azul, dirá que está encantado y además te dirá, donde te escribo mi autógrafo y ¿porqué no me compras un cuadro?...total no es tan caro...¿Y puede ser envidia o algo parecido? o ¿puede ser que no lo sea?. Es lo de siempre, según desde donde se mire, si te quedas con el lado plasta, debe ser un puto coñazo y si te quedas con el lado pragmático, eso te da pelas y fama y ya está...ya no hay más que discutir y punto.
Creo que nunca entenderemos a las personas globalmente, siempre seremos parciales y creo que siempre nos cebaremos con esa parcialidad. Porque esto nos pasa a todos, a un actor, a un médico, a un maestro, a un ingeniero y la gente se quedará y siempre con aquél hecho de aquél día y de aquél momento. Lo demás no existe o si existe no tendrá ninguna importancia, porque los humanos somos así de miopes. En todo trabajo o actividad hay un hecho que está por encima de los demás y que no siempre es el más razonable o el más lógico, pero sí que está como predeterminado en el subconsciente colectivo.
Ya puedes ser el mejor médico del mundo que no importa tanto, importa más que justo en aquél día, en aquél sitio y a aquella determinada persona, que por ejemplo le quitarás una espina de su garganta...porque a partir de ese día se te considerará el médico casi perfecto y todo por una mierda de espina de pescado que has quitado...Es que la vida es así de injusta, pero aún así y todo, la vida me gusta. Si me gustan sus imperfecciones, sus malos rollos, sus injusticias...solo hay que pensar y por un solo momento, como me gustará lo demás. En fin que tengo que decir y concluir: ¡qué estoy enamorado de la vida!
Creo que nunca entenderemos a las personas globalmente, siempre seremos parciales y creo que siempre nos cebaremos con esa parcialidad. Porque esto nos pasa a todos, a un actor, a un médico, a un maestro, a un ingeniero y la gente se quedará y siempre con aquél hecho de aquél día y de aquél momento. Lo demás no existe o si existe no tendrá ninguna importancia, porque los humanos somos así de miopes. En todo trabajo o actividad hay un hecho que está por encima de los demás y que no siempre es el más razonable o el más lógico, pero sí que está como predeterminado en el subconsciente colectivo.
Ya puedes ser el mejor médico del mundo que no importa tanto, importa más que justo en aquél día, en aquél sitio y a aquella determinada persona, que por ejemplo le quitarás una espina de su garganta...porque a partir de ese día se te considerará el médico casi perfecto y todo por una mierda de espina de pescado que has quitado...Es que la vida es así de injusta, pero aún así y todo, la vida me gusta. Si me gustan sus imperfecciones, sus malos rollos, sus injusticias...solo hay que pensar y por un solo momento, como me gustará lo demás. En fin que tengo que decir y concluir: ¡qué estoy enamorado de la vida!
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