Dime madre
dime madre...
porque a mí me ha pasado esto
y porque nunca me dijiste que algún día me iba a pasar...
Yo te juro,
que tengo cuidado con todo y con todos,
que no me fío de nadie,
que mantengo distancias,
como tú me dijiste
y es más,
hasta aparto la vista
de lo que no me gusta ver y creer.
Madre,
yo sé
que soy hijo de una triste tarde de verano
algunos paisanos decían que llovía a mares,
pero seguía siendo verano
y por eso sudo con tanta intensidad
y más cuando empieza anochecer,
en fin, soy un hijo de la calle y del anochecer,
pero nunca he entendido
porque ha tenido que nacer.
Pero eso no te lo tengo que preguntar a ti
y espero que mis preguntas
te suenen a risa con ecos...
al fin y al cabo,
nunca nos entendimos
y menos, nos vamos entender ahora.
Tú, ya estás muerta
y yo estoy en camino...
y mira y ahora mismo
un gusano me ha salido del ombligo...
No hay comentarios:
Publicar un comentario