Y dado que hoy me sentía raro
me acabo de afeitar
y porque me sentía feo
y con un ligero toque asqueroso
además,
con mala cara y como demasiado descuidado
y como si me importara todo un carajo.
Cuando yo por dentro y siento contradecirme
me veo brillante, sonriente hacia adentro,
con el alma dispuesta para dar batalla
valiente, sin miedo
y aunque sé que eso es un espejismo
que solo ocurre cada cien años
y ahora mismo son las 6 de la tarde
de un día cualquiera de agosto
y sería un día para ser anotado en los anales de la historia
me sentía feo por fuera
y ahora me siento guapo por fuera y por dentro
y eso, no se consigue todos los días.
Digo yo,
que algo habré hecho bien.

No hay comentarios:
Publicar un comentario