Y ahora pega el sol sobre mi mesa y yo me dejo acariciar por su mano. A ésta hora me pongo tierno y debe ser que el proceso de digestión baja mi nivel defensivo. Ya se sabe, la digestión acumula sangre y lo quita de otros sitios. Después de comer puede gustarme todo, no me influye mucho la carencia de sangre en mi cabeza. A mi gusta esa filosofía que dice, que para combatir la desidia hay que meterse caña y ponerse a sudar como un cerdo. Ahora ya no tengo el jardín de mi casa de Chiclana para deshagarme, pues era práctica habitual y con una solana que te cagas, el ponerme a cortar el césped en el postpandrio o ponerme a limpiar y pintar la piscina. Allí metido en la olla del infierno y a más de 30º y respirando sudor con agua fuerte.Bueno pues así soy y a quién no le guste que no me lea. Tengo un amigo que dice que cuando sopla el viento de Levante en Cádiz, un viento que viene del desierto y que te deja medio muerto, hay que levantar el culo y ponerse a currar como un loco. Y yo comparto su filosofía o él la mía, es decir nos conjuntamos con el mismo pensamiento. A mal cuerpo buena cara y esa solo se consigue con el esfuerzo. Masoca, puede, y masoca al cuadrado. A mi lo de la siesta, como que no, la siesta se la dejo a los que dicen que han madrugado mucho o que han dormido poco, es decir se la dejo a los tienen necesidad de justificarse ante si mismos.
La siesta no cuadra con nada. Pero es la siesta y la siesta es muy española y con eso llega y se justifica, ¡no saben los guiris lo que se pierden!. Pues yo no soy guiri y no sé lo que me pierdo, pues las pocos veces en que sobo a esas horas, la mayoría me sienta como una patada en los cojones. Me levanto de mala hostia y con el cuerpo cortado. Pero bueno, la siesta es optativa y nadie te obliga a planchar la oreja. Así que la siesta es libre y cada uno que haga lo que quiera, pero eso sí, sin ideología añadida, pues sobran las consignas patrioteras sobre la siesta. Y lo que había que decir, es que uno duerme la siesta porque le sale de los huevos o de los ovarios.
No hay comentarios:
Publicar un comentario