Estoy pensando que no entiendo muchas cosas y entre ellas está, el que uno se tenga que ir de su ciudad o de su pueblo y por tener que trabajar. Vamos que entiendo el incordio que supone el tenerse que alejar de lo más cercano, pero hasta ahí lo entiendo. Después ya no y el pobrecito de mi que no puedo estar ahí y en mi ciudad. Y eso pasa especialmente en Cádiz y pasa con los gaditanos que se van y ayy¡¡¡ mi Cádiz y mi Caleta y mi Playa y algunos hasta prefieren quedarse allí y muertos de hambre. Porque Cádiz es la provincia de España con más paro y es la primera de Europa en carne de paro.
Miles de parados rondan la ciudad y eso que su Alcaldesa ya procura todos lo veranos hacer limpieza étnica. Joder pero ante el hambre, si toca emigrar y por muy bonita que sea tu ciudad (que en éste caso, si lo es), tendrás que buscarte la vida lejos de tu puta ciudad. Y coño ya irás de vez en cuando a quitarte el mono. Y los que no se van y se quedan viviendo hacinados en pisos donde caben 4 personas, pero en la que viven 10. Y cuando llega la paguita de la abuela y tu con 40 tacos encima, pidiendo 10 euros para poder ir a privar.
Miles de parados rondan la ciudad y eso que su Alcaldesa ya procura todos lo veranos hacer limpieza étnica. Joder pero ante el hambre, si toca emigrar y por muy bonita que sea tu ciudad (que en éste caso, si lo es), tendrás que buscarte la vida lejos de tu puta ciudad. Y coño ya irás de vez en cuando a quitarte el mono. Y los que no se van y se quedan viviendo hacinados en pisos donde caben 4 personas, pero en la que viven 10. Y cuando llega la paguita de la abuela y tu con 40 tacos encima, pidiendo 10 euros para poder ir a privar.
Triste no es, es más que eso, es humillante, es patético y es sobre todo incomprensible. Señores que hay que vivir con un poco de dignidad y la dignidad si no la puedes buscar en tu ciudad, pues la buscas si hace falta, en el más allá. Venga tío espabile y mueve el culo y deja de pensar que más lejos de la frontera de tu ciudad, solo hay fealdad. Pues no señor, hay vida, hay tanta vida como en la ciudad que dejaste detrás. Ni más ni menos, diferente vida, pero ser diferente no es malo. Coño, que por muy bonita que fuera mi cuna yo no voy con ella por cada sitio en donde caigo.
Y además yo adoro A mi Cádiz y me lleno la boca de saliva cada vez que pienso en ella, pero no soy un flojo de mierda que se pone de parapeto, lo bonita que es mi ciudad. Un campo de concentración hacía falta poner a la puertas de mi Cádiz y el que no quiera buscarse un curre en la lejanía, literalmente lanzarlo al Océano Atlántico. No hay derecho que unos se maten por cruzar el charco y vengan en pateras asesinas y en cambio otros, hay que darles la comida ya masticada y porque les guste la vista que tiene su ciudad.
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