Ahora resulta que el Estado Islámico sigue avanzando y nosotros como si nada, como sino fuera con nosotros, como si sus creencias nazis religiosas no fueran contra nuestros principios. Bueno, lo que realmente pasa es que de momento no amenazan territorios que molesten a los ricos de éste mundo, porque de momento avanzan por desiertos y se hacen con el poder de alguna ciudad que lo que tienen, es riqueza cultural. Ya se sabe como funciona la cosa, mientras no toquen territorios de valor económico, se les dejará hacer lo que quieran.
Yo no es que me sienta amenazado o sea que no veo en peligro mi vida, pero percibo esa negra sombra que emanan y claro y de repente, me veo en las antípodas de la Historia. Me veo con un turbante en la cabeza y con un arma en la mano y a todo el que repique le arranco la cabeza, después llego a casa y con las manos aún ensangrentadas y le arreo unas buenas ostias a mi mujer..., porque supongo que de alguna forma ha pecado y sino ha pecado, que se joda que para eso es una mujer.
Pues en clave de morse éste el funcionamiento social que ellos pregonan, aparte de destruir todo lo que no hable de Alá y de su profeta. Y mira que nos ha costado siglos y más siglos mejorar nuestro funcionamiento social y que aún así, dista mucho de ser un buen funcionamiento, pero desde luego lo que queda más que claro, es que de ésta forma no se avanza y en ese contexto que plantea el Estado Islámico sólo faltaría la Santa Inquisición, que de alguna forma ya la tendrán montada, sólo que con otro nombre. Y es que a veces no hace falta estar en medio del frente, llega con observar lo que pasa a tú alrededor y ahora veo a los musulmanes que viven en nuestras tierras más cabizbajos y más acojonados que nunca. Todos cumplen los designios que marca su religión y a pies juntillas y el que no lo hace por convicción, lo hace por miedo. Y por eso repito, que yo no esoty en el frente de la batalla, pero percibo sus sombras, sus negras sombras...
Yo no es que me sienta amenazado o sea que no veo en peligro mi vida, pero percibo esa negra sombra que emanan y claro y de repente, me veo en las antípodas de la Historia. Me veo con un turbante en la cabeza y con un arma en la mano y a todo el que repique le arranco la cabeza, después llego a casa y con las manos aún ensangrentadas y le arreo unas buenas ostias a mi mujer..., porque supongo que de alguna forma ha pecado y sino ha pecado, que se joda que para eso es una mujer.Pues en clave de morse éste el funcionamiento social que ellos pregonan, aparte de destruir todo lo que no hable de Alá y de su profeta. Y mira que nos ha costado siglos y más siglos mejorar nuestro funcionamiento social y que aún así, dista mucho de ser un buen funcionamiento, pero desde luego lo que queda más que claro, es que de ésta forma no se avanza y en ese contexto que plantea el Estado Islámico sólo faltaría la Santa Inquisición, que de alguna forma ya la tendrán montada, sólo que con otro nombre. Y es que a veces no hace falta estar en medio del frente, llega con observar lo que pasa a tú alrededor y ahora veo a los musulmanes que viven en nuestras tierras más cabizbajos y más acojonados que nunca. Todos cumplen los designios que marca su religión y a pies juntillas y el que no lo hace por convicción, lo hace por miedo. Y por eso repito, que yo no esoty en el frente de la batalla, pero percibo sus sombras, sus negras sombras...
No hay comentarios:
Publicar un comentario