UN PLAN B

La oscuridad permanece en éste país o en éste país de países como dirían los nacionalistas o como dirían los más ultra nacionalistas: en éste Estado que nos oprime. Bueno, mi idea es muy clara: éste Estado nos oprime igual con o sin país, pero con país un poco más. Los galimatías de las palabras, sus enredos, sus vueltas de tuerca, sus sentidos torticeros. Pero volvamos al tema que iba, era que esto no evoluciona, que seguimos estancados en el tema de las elecciones generales, que de nuevo tendremos o tendréis que votar, porque yo dudo mucho de mi historia, dudo que en vista del éxito obtenido, que mi voto sirva para algo más. Votad, votad pueblo llano, votad porque es vuestra obligación, la mía (la del político) es jugar al escondite.

Que la cosa está más que dividida está clarísima, la derecha por un lado y que se presenta más dura que un bunker y por el otro lado la izquierda, que suma partidos y grupúsculos e incluso mete en la izquierda a grupos como PSOE, que como izquierda sólo le quedan los flecos. Yo lo dije de siempre, hay que saber perder, pero claro, si en las elecciones vendiste la moto ganadora, vendiste hasta un posible Gobierno de izquierdas y con nombres, puestos y todo, el palo ha resultado ser tremendo. Tocados y hundidos. Y sí, hay que tener moral de ganador, para eso te presentas a unas elecciones, para ganar, pero señores hay que tener un plan B y porque como se ha visto, también se puede perder.

No señor, no nacimos para perder, pero si pasa, el perder, hay que saber  lo que hacer, hay que tener otro plan y otra historia. Yo llevo toda mi vida esperando a un Gobierno de izquierdas y no me valen los Gobiernos sucedáneos, los que dicen ser izquierda (como el PSOE) y que después nos machacan más que la derecha, yo quiero un Gobierno de izquierda por honestidad, por solidaridad, por todos esos valores que hacen grande el ser de izquierda y no quiero falsos pactos con falsas filosofías.




No hay comentarios:

Publicar un comentario

LA CAÍDA de Batania

Fue mi historia con ella como tirarse del décimo y encontrarse en el aire con una mujer que se había lanzado del noveno: pensé que nos unía ...