Al final el día empezó muy bien
y por lo que sea, ahora ya no va tan bien,
siempre hay alguien que te jode la fiesta,
yo he llegado a pensar que nos vigilan desde las lejanas alturas
y el que ese día está contento y medio feliz o feliz del todo,
emite radiaciones de rayos gamma que son detectadas por los radares celestiales
y entonces y una vez detectado te envían un puto ángel con alas y todo,
se cuela en un cuerpo humano compatible,
normalmente el grado de compatibilidad se mide por su mala hostia o mala baba
y juntos, el cuerpo humano y el celestial son enviados con el mismo envase,
claro que el cuerpo te resulta conocido
pero no su mente ni su alma
pero de alguna manera te confías y te relajas
y cuando te sientes en la puta cima de la vida,
viene ese engendro alado a joderte y a dejarte bien jodido,
tirado en una cuneta como una colilla,
pisoteado como un desperdicio podrido,
despreciado por la vida y por los humanos,
tus congéneres te miran raro,
huelen algo que no les gusta
y lo que ves y lo que sientes
es que todos acaban desapareciendo de tu alrededor,
llevas el cartel encima de "bicho raro y maldito"
y aunque pongas cara de compungido y apenado,
la gente pasa igualmente de ti
y en ese mismo momento,
te acuerdas de como habías comenzado el día,
te acuerdas de que todo era de dulce pastel,
que era suave y tierno, que era bonito y de bondad infinita
y así era hasta que el engendro alado te puso en su punto de mira
y por eso dicen y también lo digo yo
que hasta que no acabe el día nunca se puede decir:
"Que día más increíble y más alucinante".
y por lo que sea, ahora ya no va tan bien,
siempre hay alguien que te jode la fiesta,
yo he llegado a pensar que nos vigilan desde las lejanas alturas
y el que ese día está contento y medio feliz o feliz del todo,
emite radiaciones de rayos gamma que son detectadas por los radares celestiales
y entonces y una vez detectado te envían un puto ángel con alas y todo,
se cuela en un cuerpo humano compatible,
normalmente el grado de compatibilidad se mide por su mala hostia o mala baba
y juntos, el cuerpo humano y el celestial son enviados con el mismo envase,
claro que el cuerpo te resulta conocido
pero no su mente ni su alma
pero de alguna manera te confías y te relajas
y cuando te sientes en la puta cima de la vida,
viene ese engendro alado a joderte y a dejarte bien jodido,
tirado en una cuneta como una colilla,
pisoteado como un desperdicio podrido,
despreciado por la vida y por los humanos,
tus congéneres te miran raro,
huelen algo que no les gusta
y lo que ves y lo que sientes
es que todos acaban desapareciendo de tu alrededor,
llevas el cartel encima de "bicho raro y maldito"
y aunque pongas cara de compungido y apenado,
la gente pasa igualmente de ti
y en ese mismo momento,
te acuerdas de como habías comenzado el día,
te acuerdas de que todo era de dulce pastel,
que era suave y tierno, que era bonito y de bondad infinita
y así era hasta que el engendro alado te puso en su punto de mira
y por eso dicen y también lo digo yo
que hasta que no acabe el día nunca se puede decir:
"Que día más increíble y más alucinante".
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