ENTRE DOS AGUAS

Naturalmente hoy es otro día. Y hoy es Jueves y día 14 de Marzo.Aquí en ésta Isla el día sigue caminando entre nubes borrascosas. Parece que va a llover y no llueve, simplemente sale el sol a trozos. Otro Jueves bajo el sol, otro Jueves más de tú vida. También de la mía, pero la mía es distinta pues a veces me siento el protagonista y eso desdibuja el día. Porque al fin y al cabo, que me importa que sea Jueves si yo no tengo calendario, ni el oficial, ese que marca la semana y el fin de semana, ni el alternativo, ese que dice que todos los días son iguales y que da igual comer pescado o un filete.

Yo me muevo por mis propios hilos y estos hilos están hechos de sensaciones y si hoy tengo la sensación de que es un día raro y extraño, pues actuaré en consecuencia y seré un ser raro y extraño. Cuestión de sensaciones, cuestión de sentimientos. Porque cada día lo marca un sentimiento distinto, un día te levantas cariñoso y en cambio en otro, eres un ser huraño. ¿Y eso quién lo marca y lo determina?. Quizá sean los sueños quienes te marcan las pautas. Porque lo que si es verdad, es que no te la marca el que hayas desayunado mal o que tuvieras una llamada que te ha alterado. No señor, pues hay días que todo te sale del revés y en cambio tú eres una piraña. ¡Nada puede contigo!.

¿Quién determina el día?, ¿quién te dice que tiene que ser de esta forma o manera?. Algo intangible, algo  ilógico, algo que llevas dentro, algo subjetivo y que determina tu comportamiento. Lo que pasa es que estamos acostumbrados a seguir las pautas del otro YO, algunos le llaman alma y otros le llaman karma. pero que más da como se llama, sabemos que está y eso es lo importante. Nosotros con nuestra lógica humana solo somos capaces de pulir sus aristas, pues el día ya está previamente definido y determinado.

Y hoy, ¿como me siento?. Pues me siento que camino entre dos aguas. Hay momentos de lucidez plácida y hay otros que me comería hasta las pupilas de los ojos. Y si quiero mantenerme en pie y en equilibrio tendré que pulir mis aristas más afiladas. De momento sigo en pie y con la frente bien en alto, hay mucho que ver y observar, hay mucho que escribir y decir, hay mucho que pensar, que denunciar, que reivindicar y entre dos aguas me muevo, pero tengo claro que ahora soy como un pez en el agua. Nado y me deslizo por las profundidades del Océano

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