EL CUERPO

He dormido 12 horas y porque me lo pedía el cuerpo, pero curiosamente me encuentro más cansado que ayer. Si duermes poco, porque duermes poco y si duermes mucho, porque has dormido mucho y entonces ¿en qué quedamos?. Darle su punto y su gusto al cuerpo a veces resulta difícil, su punto justo de equilibrio. Porque el cuerpo debe ser como nosotros y por tanto igual de caprichoso y cuando quiere reclamar, el que yo estoy aquí, reclama pero además reclama dos veces.

Vamos que te hace pagar dos veces y aún así no se queda contento. Ya sabéis y sino lo sabéis yo os lo digo, que vendería mi cuerpo al diablo o al gitano de mi barrio y a cambio de un cuerpo Danone y todo músculo y todo fibra y las titis alucinando conmigo, y yo el primero. Y si no hay cuerpo Danone, por lo menos un cuerpo con recambios, que hoy en día todo está inventado. Quiero un corazón nuevo y que su latido suene a trompeta. Quiero un ojo de un color llamativo y el otro de un tono apagado.
Quiero en fin, un cuerpo con recambios a la última moda.

Y hablando de modas, ahora resulta que está de moda el enseñar el musculamen y los tíos llevan camisetas sin mangas y para enseñar sus brazos hipertrofiados y si llevan un tatu, pues mejor que mejor. Un calzón del mercadillo y una camiseta con tirantes y del mismo sitio y ya está, ya está el uniforme hecho. Y esos tíos de gimnasio y de sustancias sospechosas, van luciendo músculo sin pudor ninguno. Y lo malo, es que no saben que hay una relación directa con la sustancia gris del cerebro, a cuanto más músculo hipertrofiado, menos sustancia gris en el cerebro. Pero, ¿quién soy yo para decir como se debe ir por la vida?.

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JULIO CORTÁZAR