Bueno, bueno, bueno y ¿yo que espero del día de hoy?. Primero que lleguen las 8 de la tarde y para que acabe mi guardia de avión, pues ayer me metieron una buena paliza y pasado, estuve de guardia 24 horas y también me metieron un repaso y hoy, ya he volado por la mañana y mi cuerpo ya no está para más vuelos estelares. Segundo, que el día pase y se acabe y porque las dudas se convierten en ratas, que muerden y roen los huesos. Tercero, hoy pido paz interior, pido que los volcanes no estallen, pido que los ríos se calmen y que el mar embravecido se adormezca y entonces, que yo entre directamente en la fase REM del sueño. Yo quise y quise mucho, yo quise y quise a raudales, yo quise y me quisieron, aunque yo quise pero a veces no me quisieron o me quisieron y yo no quise y al final o el resultado final, es que quise más o igual que me quisieron.
Sí, un vil y asqueroso empate pero con una balanza trucada y porque yo soy el que pone la balanza y me gusta que esté trucada. Vamos a ver, yo me autoengaño cuando yo quiero y deseo y por eso, no voy a entrar en éste tema a trapo. Y la pregunta del millón es: ¿y quién no se autoengaña?. Yo quise y quise mucho y a veces no me sentí correspondido, pero en la misma medida a mi me quisieron y yo no quise, por tanto hagamos tabla rasa y empecemos de nuevo. Yo quise y me quisieron y yo quise y unas veces fue mucho y otras veces, no fue tanto y en otras, no me quisieron y desde el principio. Pero a lo que yo voy, es que de éste mundo no me voy resentido con el querer o con el amar y eso, que aún me queda vida y que aún puedo inclinar más la balanza del lado del querer.
Y eso espero, espero inclinar más la balanza del lado bueno o del lado de los sentimientos. Como decía el otro, yo estoy activo y estoy vivo y como no me rindo, estoy seguro que tarde o temprano volveré a quedar atrapado por las telarañas de los sentimientos y en esa tupida red me moveré con soltura o eso es lo que siempre se dice, que serás liviano y que romperás las ataduras. Por tanto, ahora yo quiero, yo quiero sentir y volver a querer, quiero que la vida me estremezca de nuevo, quiero sentir los lugares más inciertos o los más escondidos del cuerpo. Pero ¿quién sabe? y ¿quién sabe si será ahora o más adelante? y porque la vida, jamás te da fechas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario