LOS GUIRIS

No sé, a veces escribir se hace difícil, pero aún así me obligo y porque no todos los días van a ser una claridad alucinante y habrá muchos días como el de hoy, días grises y donde quiere salir el sol, pero no puede...Y yo no tengo esa capacidad de poder cambiar el decorado por completo, puedo aprovecharme del viento que sopla con fuerza, con inusitada fuerza y simplemente, me dejaré llevar por él...Es que yo no comprendo al mundo sino me alío con sus elementos y hoy es el viento y mañana puede ser el mar o la lluvia o la misma luna...y es que soy de los que pienso, que si algún día no siento ninguno de estos elementos, es que entonces, ya no estoy.

Claro que después, están las estaciones, que si el otoño con sus hojas caídas y con su variedad de colores, que si el invierno con su olor a leña y a recogimiento, que si la primavera con sus explosiones de vida, que si el Verano...y aquí me freno, pues el Verano es la estación que menos me gusta y no me gusta por sus excesos caloríficos y porque todo está invadido de guiris y porque sudo lo que no se debe sudar y lo único que salvo del Verano, son sus Lunas llenas y con esas noches vestidas de gala...y porqué, aunque no sé el porqué, la gente está más contenta...

Y debe ser, porque si tú vas de guiri por la vida, tienes que demostrar que vas de guiri por la vida y entonces, tienes que llevar siempre esa sonrisa bobalicona y tener o poner cara de empanado.,.y oh!! que bonito y oh!! que maravilloso lugar y oh!! que bueno estaba el gin tonic y oh!! como me gusta el sol español. Y no sé cuando nos empezaremos a enterar de que en el mundo existe una nueva clase social, la de los GUIRIS y todos visten parecido y todos tienen casi los mismos gustos y los mismos temores y todo adoran la buena comida y sobre todo, adoran y hasta la extenuación, la buena bebida y ¡qué barato está el alcohol en España! y por si acaso, me coloco hoy y mañana también.