CUANDO ESCUCHO ESTAS COSAS...

 

Cuando escucho frases como ésta: "no sé puede venir a España y vivir a costa de los españoles", me entran ganas de reventar al mundo con toda su historia. Claro que los hay aún más peligrosos y que más o menos vienen a decir que: "que entre los refugiados se están colando un montón de terroristas islamistas" y después de dicho esto, se van a su casa a descansar y como si nada. O sea y en resumen éste clase de gentuza piensa que los refugiados son puta escoria malévola y lo dicen insistiendo más y más en el tema y meten por el medio el miedo que lógicamente se les tiene a todos los pirados que pertenecen al Estado Islámico (que es para tenérselo y más). Pero no mezclemos a gente que huye del hambre y de la guerra con gente fundamentalista. Precisamente los que huyen, huyen de ellos y de su guerra y de asesinos montajes.

Ellos juegan con el miedo y porque saben que el miedo es nuestro peor enemigo y que por miedo puedes llegar a hacer aberraciones y monstruosidades colectivas. Y ellos sueltan su dejadilla y del resto se ocupa el puto miedo y entonces, todos a levantar vallas con cuchillas y listos para aprobar leyes coercitivas y xenófobas que nos protejan de tanto mal. Y resulta que les sale el tiro por la culata y los Islamistas asesinos se nutren de terroristas que nacieron en Europa y nacidos hace bastantes años en ésta parte del mundo. Pero a ellos eso les da igual y porque su primera y única intención, es sembrar miedo y la maldad.

Y la barbaridad que se está haciendo con los refugiados les da exactamente igual y porque eso está muy lejos de nuestras fronteras y porque en el fondo, niegan su condición como seres humanos que son. No sé, yo tenía una prima que adoraba a sus perritos y hasta el máximo grado de la imbecilidad y en cambio, odiaba a los seres humanos y porque en el fondo y en la superficie, les resultaban seres repugnantes y repulsivos. Y eso mismo les pasa a estos pedazos de carne con ojos, señores que odian todo lo que huela a humano y todo musulmán es un terrorista de por sí y es un aprovechado descarado que quiere vivir de los españolitos (porque dentro de ese argumento, los musulmanes, moros y sudacas nunca pagan impuestos de ésta tierra cristiana). Pues sed bienvenidos al infierno, pedazo de cabrones y porque si un día puedo, os rociaré de gasolina y os juro, que ese día dormiré calentito y a pierna suelta.