BARNIZ SOLIDARIO

Tengo que reconocer que aún no me encuentro en mis 13, que estoy bien pero no del todo. Hoy me desperté axfisiado a las 4 de la mañana y con esa hambre de aire tan característica de estar jodido. Después conseguí de nuevo dormir, pero me he levantado agobiado. Sin fuerzas, tosiendo y con dolores musculares. Pero bueno no me muero y sobre todo debo tener paciencia. Hoy me llegó la revista de información de Médicos Sin Fronteras, con la cual colaboro económicamente y bueno me llamó de nuevo la atención. Tiene remoles los tíos y tías de MSF, pues atienden en países en donde se la juegan en el día a día. Es una ONG para quitarse el sombrero, bueno ella y otras varias.

Pero al ver la revista me vinieron a la cabeza los "fantasmas satélites". Ese personal que pulula alrededor de algunas ONG. Esos señores que se disfrazan de solidarios y en su vida privada y personal son la antítesis de la solidaridad. Vamos de los que se solidarizan porque está de moda o que lo hacen como el hecho de dar una limosna. En mi curre proliferan, pues lógicamente es un curre que se relaciona claramente con las Catástrofes. Y claro hay una pequeña legión de catastrofistas y todos tienen un Master en Catástrofes y se creen unos buenos gestores de esas situaciones.

Me acuerdo de un día que una compi de curre me dijo que había estado en el  Tsunami  de hace unos años y que tenía una mochila preparada en casa para salir escopetada en cualquier momento. Suena bien, pero solo suena. Porque la tía es un bulto de carne con un ombligo y solo se quiere y se solidariza consigo misma. Cuantas veces me pregunté, que coño hacía una tía como ésta en medio de un Tsunami, pues estoy seguro que nada, solo rellenar su expediente solidario. Después se vende hacia los demás y eso da un rango en la película. No son todos, por suerte, pero habelos hainos. Menos mal que después los hay quienes son auténticos monstruos y que saben a lo que van y el porqué lo hacen.

Y como no hay duros a pesetas, conviene tener a cada cual en su sitio. Y a mi me duele y me duele un huevo, que haya personas que juegan con cuestiones solidarias. Claro que por suerte,  no llegan al nivel del Urdangarín, el mayor de los chorizos "solidarios", pero hay que reconocer que a pequeña escala hacen daño y todo porque hay gente que cree en su barniz solidario. Pero saben venderse, aunque al final y como todo, el barniz deja al descubierto su verdadera cara y que no es otra que el individualismo egocéntrico. ¡He dicho!.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

LA CAÍDA de Batania

Fue mi historia con ella como tirarse del décimo y encontrarse en el aire con una mujer que se había lanzado del noveno: pensé que nos unía ...