Acabo de volver de la calle y me he cruzado con dos ciegos y no con dos ciegos de la Once, sino con dos ciegos de caballo. Cuanto tiempo hacía, que no veía a éste tipo de ciegos, pues entre las grandes ventajas de ésta Isla, es que drogas hay muy pocas, hay pero supongo que no serán suficientes para poner ciegos a los colgados. Así como en Cádiz tenía que atender en cada guardia una sobredosis, aquí en 6 años, tuve que atender dos o tres, no más. Por tanto el que busque encegarse en ésta Isla, lo lleva claro, a no ser que se traiga la mandanga con él.
Eran una pareja o sea tío y tía y la tía iba diciendo: "pues yo dejo el resto para la noche" o eso es lo que entendí, pues ya se sabe como hablan los fantasmas. Y yo pensando que ese resto no iba a llegar ni a las 4 de la tarde, pues cuando uno va a ese nivel de encegamiento, ya no quiere salir de él. Sinceramente yo a la noche los veo buscando otra dosis nueva y para solo aliviar el mono. Así es el futuro de los colgados, es un futuro inmediato, mañana ya se verá, pero hoy solo quiero estar ciego y cuando se está en el punto álgido de la película, es cuando se hacen promesas y juramentos de que van a cambiar su vida.
Y el punto álgido solo dura media hora, después ya es una lucha contra el demonio, ese que se llama caballo y para ello todo se basa en buscarse la vida. No hay otro sujeto en el mundo que sepa sacar mejor las pelas de la nada. Bueno de la nada, después de sablear a su pareja, si la tiene, a su madre o al vecino y porque amigos ya no tienen. Pero cuando ya no tienen a nadie, ellos son capaces de convertir las piedras en euros e igual que las consiguen, igual las consumen en un único momento.
Sino les queda ir atracando a todo lo que se menea, que eso si me pasó a mi y en A Coruña, que en dos meses intentaron sablearme 6 veces. Otra cosa es que lo consiguieran, pues de aquellas era joven y por tanto corría como un galgo y no hacía falta correr demasiado, pues los zombis de drogas tienen facilidad para sacar la navaja, pero en cambio no la tienen para correr detrás de un tío. La verdad es que pienso que el caballo, no es una droga, es veneno contra la vida.
Eran una pareja o sea tío y tía y la tía iba diciendo: "pues yo dejo el resto para la noche" o eso es lo que entendí, pues ya se sabe como hablan los fantasmas. Y yo pensando que ese resto no iba a llegar ni a las 4 de la tarde, pues cuando uno va a ese nivel de encegamiento, ya no quiere salir de él. Sinceramente yo a la noche los veo buscando otra dosis nueva y para solo aliviar el mono. Así es el futuro de los colgados, es un futuro inmediato, mañana ya se verá, pero hoy solo quiero estar ciego y cuando se está en el punto álgido de la película, es cuando se hacen promesas y juramentos de que van a cambiar su vida.Y el punto álgido solo dura media hora, después ya es una lucha contra el demonio, ese que se llama caballo y para ello todo se basa en buscarse la vida. No hay otro sujeto en el mundo que sepa sacar mejor las pelas de la nada. Bueno de la nada, después de sablear a su pareja, si la tiene, a su madre o al vecino y porque amigos ya no tienen. Pero cuando ya no tienen a nadie, ellos son capaces de convertir las piedras en euros e igual que las consiguen, igual las consumen en un único momento.
Sino les queda ir atracando a todo lo que se menea, que eso si me pasó a mi y en A Coruña, que en dos meses intentaron sablearme 6 veces. Otra cosa es que lo consiguieran, pues de aquellas era joven y por tanto corría como un galgo y no hacía falta correr demasiado, pues los zombis de drogas tienen facilidad para sacar la navaja, pero en cambio no la tienen para correr detrás de un tío. La verdad es que pienso que el caballo, no es una droga, es veneno contra la vida.
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