GAVIOTAS

Y hoy es Lunes y es Lunes lunero y más lunero que nunca, pues hoy hay luna llena y puede que sea de las más bellas. Hay luna llena y por tanto debíamos estar llenos de buenos sentimientos y por lo que yo observo, eso es como pedir peras al olmo. Yo soy el primero que noto la maldad en mi alma pecaminosa y podrida y  ante las agresiones externas yo no me calmo, ni siquiera cojo aire, salto como si tuviera un resorte en el culo y me lanzo a la yugular del que me agrede.

Yo tengo esa parte tan animal y descontrolada y en donde el instinto domina y me domina por dentro y tal cual fiera enjaulada. Quizá sea eso, que solo estoy esperando a que salte la chispa. Chispas hay muchas y muy variadas y una simple mirada mal dirigida o mal dada, ya me sirve de coartada para mi inmediato ataque. Pero lo que yo digo, que yo soy un buscador de esas coartadas y tengo a bien decir, que la desconfianza forma parte de mi estructura más íntima y más interna. Yo solo lo advierto y por si acaso.

Pero yo no soy el único, hay mucho zorro disfrazado de cordero y hay mucho listillo que solo hace que bala y por dentro son como anguilas de las alcantarillas o sea que son seres escurridizos y que parecen que solo te chupan el culo, y en realidad tiene los dientes afilados y se dan un festín con el pardillo de turno. Yo por lo menos aviso previamente y voy con la cara por delante, pero estos señores no tienen el mismo código, primero hacen que escuchan y para encontrar tus debilidades y después solo se dedican a descuartizar tu cadáver. Son como las Gaviotas, que parecen espíritus libres que toman forma de pájaros y en realidad son aves que se alimentan de la carroña ajena.