ARROGANTES Y ROGANTES


Hay arrogantes y rogantes. Estos últimos (los rogantes), son los que ruegan e imploran por la vida y toda su vida o sea, son lindas ladillitas. Y en cambio los primeros o arrogantes, son los altaneros, los que están por encima y en consecuencia, te tratan con el desprecio de su prepotente arrogancia. Después hay los regantes, pero estos sólo riegan jardines y campos y además no se meten con nadie. Rogantes, hay muchos por la vida, los hay ladinos o sea que ruegan pero parece que no lo hacen y los hay descarados, estos ruegan sin tener prejuicios y en cualquier lugar o sitio. Yo de prefirir algo, prefiero a éstos últimos, por lo menos van de cara. Los rogantes ladinos o ladillas escondidas, son eso, asquerosos como ellas y además nunca sabes por donde te van a salir y porque dominan el arte del escondite.

Los arrogantes son prepotentes y presumidos, les gusta demostrar sus logros y ostentarlos con todo su orgullo de hiena, o lo que es lo mismo, son como pavos reales. Pero además les gusta el desprecio, es decir cada logro de ellos es un insulto para tí, por lo menos eso es lo que pretenden y el que sea más o menos insultante, también depende de tí. Sobre todo depende de si tú les dejas, es decir, cuando empieza su asoballe y alardeo, en ese mismo momento, hay que tener la agilidad de cortarles el rollo o las plumas, si no después ya cojen carrerilla y ya no hay quién los pare. Si uno no consigue que cambien de rollo, es mejor dejarlos sólos, pero hacerlo en plan descarado y cortante, para que sepan que no hay dios que los aguante.

Para mi la peor "cualidad" de un arrogante es su desprecio, te ven como un gigante puede ver a una pequeña hormiguita, te ven con cara de perdonavidas y el mensaje es más que claro, él es dios y tú una mierda pinchada a un palo. Yo personalmente, uso la táctica de ser mucho mejor que él o sea más fantasma, es decir si él alardea de algo en plan divo y pensando que es el no va más, pues yo voy a ser más y le cuento otra que yo hice y que en realidad no hice y por supuesto que siempre supere su fantasmada. Como decía el otro: "Para chulo mi pirulo", lo mismo pero con otras palabras más finas.

Al arrogante le gusta tener público, pues su humillación hacia tí carecería de sentido sin que hubiera público. O sea que personalmente no te la harán, pero en grupo, es su especialidad más refinada. Y si te cojen en bola picada ya no digamos, es decir, si no contraatacas rapidamente, te lo van a restregar el resto de tus días. Les encanta humillar y poner el pie sobre los restos del cadáver enemigo. El único consuelo, es que el arrogante  se gusta tan demasiado, que al final siempre se deja llevar por su instinto de pavo real y llegará un momento que pasará la frontera y sin más, se deslizará demasiado hacia tu lado (todo, por su puto ego insaciable) y aquí es donde se le podrá pillar, pues una vez que se ha pasado tres pueblos, es el instante idóneo para dejarlo en ridículo y así, bajarle sus putos humos de payaso engreído. Cuando pillas a uno bien pillado, te quedas satisfecho para unos cuantos años y dispuesto a que venga el siguiente con su arrogancia de mierda, que ya verá como se le caerá el pelo. ¡A los arrogantes ni agua!.

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JULIO CORTÁZAR