Tras de tí,
quedó un rastro perdido,
una huella imborrable
y una ligera presencia del aroma de tu piel.
Tras de ti,
quedó un bello recuerdo de aquellos tiempos,
un beso ciego y apasionado,
y una llama que poco a poco se fue apagando.
Tras de ti,
quedó una palabra siempre inacabada,
un deseo sin cumplir
y que jamás será cumplido
y una herida abierta en la piel de mi memoria.
y una herida abierta en la piel de mi memoria.
Tras de ti,
ya no siento nada,
soy inmune al sentir,
soy alérgico al querer,
soy un manantial seco al llorar,
y es verdad...,
que esperé demasiado tiempo
para oír tu voz, de nuevo.
Tras de ti,
sólo hay la nostalgia de aquellas tardes,
hay música, hay caricias, hay besos,
hay risas y perfume a jazmín e higuera,
hay luces y sombras,
y en todas ellas estás tú,
tú y yo, los dos,
dos espléndidas almas repletas de belleza,
dos almas que se perdieron
en la espesura de nuestros sentimientos.
Y ahora sé
que tras de ti...
no quedó apenas nada.

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