VOLAR

 

Claro que me gustaría tener alas

para volar o para soñar que vuelo

y tener alas para rasgar las telarañas del tiempo,

para volver hacia atrás y hacia delante,

y en un viaje constante y alucinante

así podría deslizarme por ese agujero negro que une el antes y el después,

y no salir nunca de ese bucle interminable,

pero a veces, tengo terror y miedo,

porque para volar hay que amar el vacío.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

JULIO CORTÁZAR