A lo lejos,suena una canción de amor,
más cerca,
se oyen palabra entrecruzadas,
y aún más cerca,
yo oigo tu voz,
y es un escenario perfecto,
y lo podía ser y lo podía ser,
para hablar de amor,
Música de fondo y voces envolventes,
y tu voz melódica,
suave pero firme,
concisa e incisa,
con pausa pero sin pausa,
pero sobre todo,
hiriente cuando quiere,
y amable y fiel a la verdad.
Yo en segundo plano,
escucho y oigo,
y me hago mi composición,
y pienso que un día te quise,
pero que ya no puedo quererte más,
y no sé con que palabras decirlo,
y si debo interrumpir tu disertación,
y entonces,
una voz interior me dice,
que ya está bien de callar,
y me sale un hilo de voz,
¿qué dices?, me pregunta,
pues digo, que ya no te quiero,
y un silencio tenso por el medio,
y asoma su cabeza la palabra, ¡cabrón!,
y la música de fondo suena más fuerte,
y los gritos y palabra cercanas,
resuenan como tambores,
y ese cuerpo que fue tan querido por mi,
se levanta de la mesa,
y simplemente se va,
y se va sin mirar atrás,
¡tampoco me merezco más!
se va igual que apareció,
de repente y como si fuera una obra de dios.
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