Ahora son las 8,15 de la mañana del Domingo día 23 de Marzo y acabo de llegar de guardia. Se nota que empecé a currar, pues en estos días ha bajado y mucho la producción de escritos. No todo va a ser escribir y escribir y viva la fiesta, digo yo que habrá que hacer y atender a otras cosas mundanas y cotidianas y entre ellas, por supuesto está el currar. La verdad es que últimamente lo de currar no se encuentra dentro de mis prioridades, pero, pero ¡qué remedio me queda! y entonces tengo que hacer de tripas, corazón.
Como todo en ésta vida, lo de currar sufre altibajos de fé y ahora me encanta currar y después lo odio y al revés. Y lo peor está por venir, pues en ésta semana tengo que ver si tengo posibilidades de ponerme a currar en una clínica Privada, las necesidades económicas aprietan y sobre todo van a apretar dentro de 1 año y cuando dos de mis hijos se vayan a estudiar afuera, a la Universidad. Nunca se puede decir: "Nunca jamás" y lo digo por volver a currar en la Privada.
Pero bueno hoy es Domingo y los domingos son días de reflexión introspectiva y de ir a Misa a comulgar y también lo son de comprar El Pais y leerlo con fruición. Creo que solo haré esto último, leer la prensa y lo de la reflexión lo dejo para otra alma sufriente y que necesite el perdón de Dios. Hoy hay motos y hay fútbol y por tanto tengo la agenda llena y desbordada. ¡Es tanto pedir!, el que hoy sea un día apacible y tranquilo y que sobre todo sea un Domingo de Resurrección, por lo menos que lo sea para mi. Resucitar entre los últimos estertores de mi enfermedad y volver a ser el mismo bicho que siempre fui. ¡Veneno tengo para dar y regalar!.
Como todo en ésta vida, lo de currar sufre altibajos de fé y ahora me encanta currar y después lo odio y al revés. Y lo peor está por venir, pues en ésta semana tengo que ver si tengo posibilidades de ponerme a currar en una clínica Privada, las necesidades económicas aprietan y sobre todo van a apretar dentro de 1 año y cuando dos de mis hijos se vayan a estudiar afuera, a la Universidad. Nunca se puede decir: "Nunca jamás" y lo digo por volver a currar en la Privada.Pero bueno hoy es Domingo y los domingos son días de reflexión introspectiva y de ir a Misa a comulgar y también lo son de comprar El Pais y leerlo con fruición. Creo que solo haré esto último, leer la prensa y lo de la reflexión lo dejo para otra alma sufriente y que necesite el perdón de Dios. Hoy hay motos y hay fútbol y por tanto tengo la agenda llena y desbordada. ¡Es tanto pedir!, el que hoy sea un día apacible y tranquilo y que sobre todo sea un Domingo de Resurrección, por lo menos que lo sea para mi. Resucitar entre los últimos estertores de mi enfermedad y volver a ser el mismo bicho que siempre fui. ¡Veneno tengo para dar y regalar!.
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