
Adoro tu pelo,
y adoro tus labios,
y adoro tu perfume más íntimo,
tu esencia de menta,
y tu aliento de fresa,
y adoro el color de tu iris,
ese verde esmeralda,
ese verde que me ilumina y me irradia,
adoro tus pequeños pechos,
turgentes y orgullosos,
suaves y tiernos,
admirables y pasionales,
y esa boca de desordenados dientes,
y esa lengua que se adapta a mi boca,
y ese cuello que yo lleno de besos,
y tu espalda que es melocotón en almíbar,
y tus brazos que me abrazan
y me atrapan como a un niño,
y tus piernas que son finas esculturas,
y tus pies que más que pies,
parecen dos tentáculos,
y que más te puedo decir,
pues que me acuerdo de tu cuerpo,
y yo sueño con ello,
sueño que ese cuerpo de mujer,
algún día volverá a caer sobre mis sábanas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario