Hay una foto que viene en los paquetes de tabaco que me produce asco y me quita más las ganas de comer carne que de dejar de fumar. Ponen un un tío con su bigotillo todo deshilachado y por su cuello sale toda una masa de carne cancerígena y tal como si le saliera un monstruo por su cuello o como si saliera el tal Alien. Claro lo ves una vez y casi vomitas y ya de inmediato le das la vuelta al paquete de tabaco y juras que no volverá a comer carne en tú vida, pero de dejar de fumar, ni flores.
Siempre me pregunté como un tío con una masa tumoral tan florida y asquerosa se prestó para hacerse la foto. Porque si yo tuviera esa masa mi iría directamente al circo y para ver si me contratan y la masa habla y fuma y hasta come por sí sola, sería mi carta de presentación circense. Supongo que al tío le dijeron, pues mira le damos tanta pasta a tus herederos, porque a tí te queda un día de vida o una horas o también te pagamos el funeral y el entierro. Yo no sé de donde salió éste tipo de propaganda, pero supongo que fue alguien que convivió en las campos de concentración Nazis y allí aprendió ese arte de propaganda, que es el ser más guarro y asqueroso de la tribu.
Si pretendían que la foto produjera náuseas y vómitos, pues había que darles un 10. Ahora si pretendían que uno dejara de fumar les pondría un 0. Y si realmente los tíos que hicieron la propaganda son vegetarianos radicales y su fin era que dejáramos de comer carne, casi lo han conseguido, pues esa masa tumoral queda grabada en el cerebro y te pudre el gusto por la carne. ¡Joder! a quién le puede gustar un trozo de carne cancerígena vivita y coleando. Bueno a lo mejor a los zombies, pero ni creo que a ellos. El tío de la foto estaría más guapo con una bufandita en el cuello o con un fularcito o con un jerseycito de cuello alto, con lo que sea, con tal de esconder semejante aberración asquerosa.
Siempre me pregunté como un tío con una masa tumoral tan florida y asquerosa se prestó para hacerse la foto. Porque si yo tuviera esa masa mi iría directamente al circo y para ver si me contratan y la masa habla y fuma y hasta come por sí sola, sería mi carta de presentación circense. Supongo que al tío le dijeron, pues mira le damos tanta pasta a tus herederos, porque a tí te queda un día de vida o una horas o también te pagamos el funeral y el entierro. Yo no sé de donde salió éste tipo de propaganda, pero supongo que fue alguien que convivió en las campos de concentración Nazis y allí aprendió ese arte de propaganda, que es el ser más guarro y asqueroso de la tribu.
Si pretendían que la foto produjera náuseas y vómitos, pues había que darles un 10. Ahora si pretendían que uno dejara de fumar les pondría un 0. Y si realmente los tíos que hicieron la propaganda son vegetarianos radicales y su fin era que dejáramos de comer carne, casi lo han conseguido, pues esa masa tumoral queda grabada en el cerebro y te pudre el gusto por la carne. ¡Joder! a quién le puede gustar un trozo de carne cancerígena vivita y coleando. Bueno a lo mejor a los zombies, pero ni creo que a ellos. El tío de la foto estaría más guapo con una bufandita en el cuello o con un fularcito o con un jerseycito de cuello alto, con lo que sea, con tal de esconder semejante aberración asquerosa.

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