MONO DE MONTAR MUEBLES

Tengo mono de montar muebles y no unos muebles cualquiera, tengo mono de montar muebles Ikea. Y supongo que es porque tengo que comprar un par de esos muebles de cartón y piedra, cosa que ya pendiente desde hace tiempo, pero ahora me toca alquilar mi casa durante unos días del mes de Agosto y por tanto tengo que dejarla lista. Es la única ventaja que tiene alquilar tú casa, que te ves obligado a dejarla limpia y arreglada y después de que se vayan los inquilinos, te queda lista para ti solito y para el resto de año. Pero claro tiene el inconveniente de que es tu casa y tu casa es sagrada o por lo menos para mi lo es y no me importa para nada dejar mi casa, pero dejársela a quién yo quiero. 

Pero la pasta es la pasta asesina y pasa por encima de todos los principios y hablando en plata, si quiero pasta, pues tendré que poner el culo. Mi casa es demasiado grande para poner todos muebles de primera o aunque fueran de segunda, tampoco podría y entonces toca recurrir a los muebles de pegote. Estos muebles de Ikea me parecen muebles de un decorado, o sea que todo está pintado sobre un panel y que en  realidad no hay ni un puto mueble real. Pero no, son reales, son reales y desmontables y lo peor que tienen es que primero hay que montarlos y eso requiere un cursillo acelerado de como montar muebles de Ikea.

Y lo más cojonudo de todo, es que hay tías o tíos que están orgullosos de saber montar estos muebles de pacotilla. Y saben como desplegar la mercancía y donde y como clasificar sus putos tornillos y es mejor usar un taladro eléctrico y porque sino te dejas las manos y hay que seguir el plano y al pie de la letra y no te saltes nada y menos le pongas un poco de imaginación al asunto. Son muebles cuadriculados y van por pasos milimétricos y sobre todo hay que tener paciencia y poner cada tornillo en el agujero que toca, porque sino y esto lo aseguro, te sobrarán tornillos por todos lados y a lo mejor hasta alguna pieza te sobra.

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JULIO CORTÁZAR