NECESIDADES ANTROPOMÓRFICAS

La hora bruja, la hora de la puta comida. Ya son las 2 de la tarde y yo con estos pelos, sin comer y con un hambre que muerdo. Yo lo de comer y lo de sobar, como que no lo entiendo mucho, no entiendo esa necesidad y más a las alturas en que estamos. Tantos inventos, tantas medicinas de mierda, tantos conocimientos sobre nuestro cuerpo y aún necesitamos el tener que dormir y comer. Y dicen que son los instintos primitivos los que mandan sobre ésta cuestión, pero coño si hemos evolucionado como personas y ya no somos tan animales como antes, aunque a veces lo dudo, porque seguimos teniendo éstas necesidades primordiales.

Joder, si nos bajamos de los árboles y nos pusimos erectos y sobre dos piernas, ¿porque no conseguimos tener que dejar de comer y sobar?. Supongo que estarán detrás las grandes multinacionales de los alimentos y lo estarán, claro está, por sus propios intereses. Hay que vender cebada y para que engorden y se ceben y al final, les guste esto de estar gorditos. Y el pastillamen para sobar, cuantas pastillas hay en el mercado para sobar mecánicamente. Hay infinitas y las hay que cuelgan más que la droga intravenosa. Comer y sobar, lo ideal de ésta sociedad.

Comer como un cerdo y dormir como una marmota y así no te enteras de nada. Comes y te sacies y después una buena siesta. Duermes y como te cuesta dormir, te zampas una pastilla y entonces duermes dos veces. Y claro nadie duerme bien y yo tengo insomnio y doy muchas vueltas en la cama y te dan una pastilla que deja grogui a un gorila y por tanto te duermes en plan automático y así hasta el día siguiente y en donde te despiertas empanado. Pero eso sí, se puede vivir empanado durante el día, ¡total para lo que hay que ver!, dirán algunos de éstos zombies.

Sí, parecemos zombies y porque nos movemos con automatismos o como diría el otro, nos movemos por las necesidades de la carne. Y si la carne te pide papeo, pues se papea y si te pide sobar, se soba y punto. Hay quién le llama necesidades fisiológicas y yo no digo que así no se llamen, sólo digo que en épocas de bombas nucleares y de fusión de los átomos, aún parece mentira que tengamos que tener la necesidad de comer y de dormir. Yo les llamaría mejor, necesidades antropomórficas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

JULIO CORTÁZAR