Y mira que quedan cosas en el tintero, pues por mucho que me apure escribiendo, el cerebro siempre me gana. como se dice, ¡no doy a vasto! y no sé si en éste caso vasto se escribe con uve o con be. Supongo que con uve, pues vasto es algo inabarcable y basto es algo tangible y concreto. Aquí en ésta isla lo único vasto que hay es el mar, pues lo demás es basto y menos mal que es así, pues es verdad que está bastante bien conservada. Menorca patrimonio de la Biosfera, que suena que te cagas.
Sensación de estar en otra esfera si la hay y desde que pones un pie en tierra, te das cuenta que las cosas van de otra manera. Primero, no debes alterarte y por nada ni por nadie. No muestres gestos de desespero ni de cabreo, ni manifiestes demasiado que estás contento, y tú mantente siempre con el mismo bioritmo y con el mismo careto de haba. Segundo, no tengas prisas, las prisas son para los de la Península y para los que no saben disfrutar de un ritmo enlentecido. Es el ritmo Isleño, propiamente dicho.
Tercero, saluda correctamente todos los días y da los buenos días y las buenas tardes y noches y eso no quiere decir que saludes efusivamente, nada de eso, nada de abrazos y de besos ni de carantoñas innecesarias, solo las palabras precisas. Cuarto, no pretendas cambiar las reglas del juego y que los círculos cerrados se abran. Pues no, ellos, los Isleños, tienen su orden propio y hacen bien en tenerlo, porque yo los único que les puede ofrecer es vivir en el puto desorden.
Quinto, debes conducir sin intermitentes, pues aquí no se usan y solo porque son un adorno o algo parecido. Sexto, tienes que tener una barquita y para ir en verano a recorrer la costa de la Isla. Y por tanto un garaje en tú casa y para poder guardar la barquita durante el invierno. Aquí a la barquita se le llama "Llaut" y debes tener uno y para esa semana de verano en que por fin decides dar la vuelta a la Isla.
Séptimo, todo tiene su orden y eso tienes que comprenderlo y debes saber que el verano es para fiestas y para una semana de barca y que el otoño es para las setas y que el invierno es para aburrirte cruelmente. Si esto lo entiendes ya te será fácil la convivencia en el día a día. Octavo, cuando sople la Tramontana, tampoco debes alterarte e incluso debes poner cara de que estás agradecido. En definitiva, para ir bien en la Isla, lo fundamental es mantener la calma, la calma chicha y sobre todo, no alterarse por nada.
Es decir, tienes que poner cara de poker.


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