VACACIONES

Me acabo de zampar una pizza y ahora me sale la bilis por la boca. Ya no tengo un estómago de boa y  ya no digiero las cosas lentamente. Ahora las digiero o no las digiero y no hay punto medio. Claro que no es la primera vez que me pasa con una pizza, el que se me quede atravesada y todo el ácido digestivo sube por el esófago y hacia la boca. ¡Me cago en todo lo que se menea!. Esto escribí ayer y antes de irme a la cama. Después la noche fue toledana, pues me desperté varias veces  quemado por el ácido. Tuve que dormir casi sentado y para que el ácido no saliera de su sitio y claro, también tomarme un buen antiácido.


Hoy es Jueves Santo y día 17 de Abril y solo me queda hoy para poder ir de vacaciones a mi tierra gaditana. Como siempre me pasa cuando hace tiempo que no viajo, que se acerca el día y me voy poniendo nervioso, vamos que tampoco me da el yuyu, pero sí que me quedo medio en blanco y quiero irme y también quiero quedarme. Vamos el miedo del novato, pues por mucho que yo haya vivido en tres esquinas distintas de la  Península y me haya cambiado otras tantas veces de casa, cuando pasa el tiempo, todo eso se te olvida y casi se parece al principio.

También sin exagerar demasiado y por eso digo, se parece. Al final son solo cuatro días de mierda, pero algo es algo y es mucho más que nada. Por lo menos me dará tiempo de oler las mareas bajas y de pasearme por su arena mojada y saludar a los cuatro amigos que aún me quedan  y comer pescadito frito y algún que otro langostino y ya está. Con eso me conformo o sea esos son mis mínimos, los máximos no los pongo porque no merece la pena, el máximo para mi es que disfrute los cuatro días.

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JULIO CORTÁZAR