Y puede y solo puede que todo lo que diga sea mentira, pero lo dudo y lo dudo mucho. Porque yo miro las cosas desde muchos ángulos, algunos agudos, otros obtusos e incluso los veo por su ángulo muerto y claro, con toda ésta serie de datos, puedo elaborar verdades como churros. Y no me considero Dios y porque él está por debajo, yo soy más del lado del Diablo y porque me gustan las maldades. Si en mundo como el que vivimos vamos de buenos y angelicales, llevaremos palos por todos lados.Yo prefiero la maldad y para atacar y para poder defenderme. En la maldad y por mucho que lo intente yo soy un aprendiz de brujo, pues hay maestros por todos lados. Hay los catedráticos del Gobierno de turno, hoy toca el PP, pero en otros tiempos nos tocó el PSOE, ¡qué más da la cara A o la cara B de la maldad!, si entre ellos solo se intercambian. Y es que hay que tener maldad para prometer cosas y que después nunca cumplen y eso debía ser pecado y no lo es. Y no lo es porque en el tinglado está metida también la Santa Madre Iglesia y el arzobispo de turno es uno más del gremio.
Un contubernio tienen montado, un contubernio de curas, obispos, ministros, banqueros y yupis de película y de los que usan mucha gomina. Gomina para follar, gomina para el pelo, gomina para acompañar la comida y gomina para borrar sus estafas millonarias. Porque vamos a ver, estos señores no cometen unos pufos cualquiera, son pufos de alto postín y de alto abolengo y por supuesto, de alto contenido en dinero.Y sino que se lo pregunten al Rey y a su hija y a su Urdangarín del alma y eso por empezar por los de más arriba. El resto fueron a la misma escuela que el Rey, solo que faltaron un poco más a clase y por eso se las ha pillado más fácilmente. Y todos lo que quedan, y todos los que tienen cuentas en Suiza y que dicen que son particulares y particulares lo serán, pero todas tienen la particularidad de haber sisado dinero del Estado.
Si vivimos en el país que nos merecemos y ahora vendrán las elecciones y votaremos a uno de los dos partidos. Porque lo que yo estoy más que harto, es de oír que nadie votó al PP y entonces ¿quién lo votó? y todos dicen, yo no, yo no lo voté. Entonces sería Dios y sus ángeles del cielo los que votaron al PP. Pues mira por donde hoy por fin resolví una de mis dudas existenciales.
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