No te pido que me mates

 No te pido que me mates

porque primero, no vas a poder

y segundo, para matarme hay que pedirme permiso.

Para morirme ya me valgo yo solito,

no necesito que nadie me empuje al vacío

o que me tire delante de un coche. 

Sé tirarme por un precipicio o por un acantilado

o desde un puente más alto que nuestras suposiciones,

yo podría nadar por un río a contracorriente

o descender el himalaya montado en un alud,

peores cosas he hecho

y ya véis...aquí estoy,

no me he muerto,

ni soy un muerto viviente,

ni como hígados ni riñones

y si aún así y todo...me buscáis

os espero detrás de la puerta que separa la vida y la muerte.


















No hay comentarios:

Publicar un comentario

Fernando Pessoa. "Yo plural"

  «Si, después de que muera, se quisiera escribir mi biografía. Nada más sencillo. Solo tienen dos fechas: la de mi nacimiento y la de mi mu...