TODOS SIN EXCEPCIÓN

Todos, alguna vez,
hemos tenido estertores pulmonares
y penas anímicas que casi nos matan de angustia.
Todos, sin excepción,
hemos crecido dentro de nuestro caparazón
y solo de vez en cuando
nos hemos reído juntos y a carcajadas
de nuestro pasado, presente y futuro.
Todos hemos sido niños
y jóvenes y adultos
y ahora,
que uno está casi de vuelta,
es cuando uno se da cuenta
de la belleza del viaje de ida.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

JULIO CORTÁZAR